La jueza Mercedes Alaya volvió ayer a dar otro golpe a los socialistas al filo del inicio de la campaña. En un nuevo auto imputó a el exalcalde de la localidad sevillana de Cazalla de la Sierra Ángel Rodríguez de la Borbolla, hermano del expresidente de la Junta de Andalucía José Rodríguez de la Borbolla, por haber recibido nueve millones de euros en ayudas públicas.

La magistrada también imputa al hijo del exalcalde socialista de El Pedroso (Sevilla), José Enrique Rosendo, y a un empresario de confianza de éste, José María Sayago, y que, según la magistrada, recibió 29 millones de euros del llamado «fondo de reptiles». Ambos fueron concejales por el PSOE del citado municipio, del que es natural el principal imputado, el exdirector general de Trabajo Francisco Javier Guerrero. La magistrada explica en su auto que ha decidido imputar a estas tres personas, relacionadas con la trama de empresas de la Sierra Norte investigadas por recibir ayudas de forma irregular, tras haber tenido acceso documentación aportada por la Junta sobre las subvenciones a estas entidades. Además, recuerda que Guerrero declarará hoy sobre esta ayudas y, por tanto, para «garantizar el derecho de defensa» ha decidido imputar a los tres para que sus letrados puedan tener acceso a las actuaciones y a la declaración de Guerrero.

Éste fue cuestionado por la Guardia Civil en su última declaración sobre este entramado de empresas y señaló entonces directamente al exconsejero de Empleo y actual senador José Antonio Viera, destacando su «especial interés» en que se otorgaran ayudas a estas empresas por su vinculación con Rosendo y Sayago. Hoy la jueza le interrogará sobre esta «trama». Y es que según el auto de la magistrada Rodríguez de la Borbolla «mediante un sistema de entramado de empresas dedicadas a la manufactura del corcho y ubicadas en la Sierra Norte habría obtenido, con total ausencia de procedimiento, ayudas otorgadas por Empleo de 9.009.108 euros con cargos a los fondos públicos y a través de la agencia IDEA».