La secretaria general del PSOE de Sevilla y consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, defendió ayer la labor del presidente de la Junta de Andalucía y del PSOE, José Antonio Griñán, «que siempre ha arrimado el hombro», y dijo que «la lealtad» en el partido debe ser «recíproca».

Preguntada por los periodistas por el reclamo que realizó el martes el expresidente andaluz Manuel Chaves a José Antonio Griñán, para que apoye «sin reservas» al secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, Díaz afirmó que el presidente lo lleva haciendo «desde la misma noche en que fue elegido como secretario general del partido en el congreso de Sevilla».

Así, Díaz señaló que Griñán, como secretario general de los socialistas andaluces, «siempre ha estado arrimando el hombro al partido a nivel estatal y a su secretario general Alfredo Pérez Rubalcaba». Es más, recordó que incluso antes del congreso de Sevilla, «se dedicó a coser y unir el partido para que el resultado fuera lo más óptimo», dado el momento de tremenda dificultad que atraviesa el partido.

«Eso sí», advirtió, «la lealtad debe ser recíproca y de ida y vuelta y la misma lealtad que nosotros mostramos la tiene que mostrar el conjunto de la organización.

Díaz hizo un llamamiento a los socialistas para abandonar ya los debates orgánicos y que entiendan que en la calle lo que hay es «un gran drama social», de miles de familias que lo están pasando mal y que no entienden que los socialistas sigan hablando de sí mismos y no de lo que les está pasando a ellos.

En cuanto a la sugerencia de Carme Chacón de convocar primarias, se mostró partidaria de este «buen instrumento» aunque debe hacerse «cuando toque, en el momento más cercano al proceso electoral» dado que «el partido no se puede distraer ahora en eso».