El PP-A alertó ayer de que la Junta de Andalucía tiene reconocida una deuda de 2.718 millones de euros, a 30 de octubre de este ejercicio, que está suponiendo un «lastre» para la recuperación económica de la comunidad, a lo que se suma el incumplimiento del objetivo de déficit fijado para las autonomías.

En rueda de prensa, el secretario general del PP-A, José Luis Sanz, calificó de «moroso» al «bipartito de perdedores» que gobierna Andalucía y exigió al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, que acaben ya los «martes al sol del Consejo de Gobierno» y se empiecen a tomar medidas para la recuperación económica y la generación de empleo.

Según los datos aportados por Sanz, la Junta de Andalucía tiene reconocida, hasta el 30 de octubre de este año, una deuda de 2.718 millones de euros, que afecta a todos los capítulos, salvo el relativo a gastos de personal, esto es, las nóminas.

Detalló que en el capítulo 2, que se refiere a los gastos de consejerías, la deuda con proveedores asciende a 558 millones de euros; en el capítulo 4, transferencias corrientes, la deuda es de 768 millones (426 millones solo en transferencias corrientes a universidades; 118 millones a familias y entidades sin ánimo de lucro; 32 millones a corporaciones locales y 28 millones a empresas privadas); en el capítulo 6, inversiones reales, la deuda asciende a 249 millones, y en capítulo 7, transferencias de capital, a 953 millones de euros (9,7 a corporaciones locales para centros de infantil y primaria; 27 millones a empresas privadas y 20 millones por transferencias de capital con familias e instituciones sin ánimo de lucro).

Sanz precisó que esa es la deuda «reconocida» por la Junta, lo que no quiere decir que sea la única que tiene el «bipartito de izquierda radical».

Asimismo, expresó su preocupación por que el Gobierno andaluz tampoco está cumpliendo el objetivo de déficit fijado para las comunidades en este ejercicio, del 1,5%, toda vez que en el tercer trimestre de 2012 ya se situaba en el 1,63%. Según Sanz, Griñán nunca cumplió el objeto de déficit durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y ahora va camino de incumplirlo también.