El presidente de la Cámara de Cuentas de Andalucía, Antonio López, señaló ayer «el deterioro» de las finanzas de la Junta en el ejercicio de 2011, en parte, por el propio contexto en que se desenvuelve la actividad pública, y vaticinó que previsiblemente en 2012 se mantenga esta situación económica o «incluso empeore algo».

En declaraciones a los periodistas tras mantener un encuentro con el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para entregarle el Informe Provisional de Fiscalización de la Cuenta General, López indicó que los ingresos que recibe la Junta de Andalucía dependen mucho de la actividad económica y «si ésta no mejora, estos recursos tampoco».

Según expuso, la recaudación neta de la Junta fue de 24.988 millones, un 14,4% menos que el año anterior, y los pagos realizados ascendieron a 26.654 millones, un 0,2% más.

Los derechos reconocidos del ejercicio 2011 fueron 23.978 millones, un 4,17% menos, mientras que las obligaciones subieron un 0,66% hasta los 24.926 millones, lo que pone de relieve un desequilibrio de 948 millones.

Asimismo, en 2011 la Junta registró un déficit de 1.280 millones, un dato bastante significativo teniendo en cuenta que en el año anterior se produjo un superávit de 2.046 millones. Por su parte, el remanente de tesorería fue negativo de 606 millones, lo que destaca «la necesidad de financiación a corto plazo», y un dato significativo frente al de 2010 cuando se consiguió un superávit de 1.308 millones.

En cuanto al endeudamiento público, alcanzó los 13.899 millones, un incremento de casi el 17%, del que el 92% era a largo plazo y suponía el 9,5% del PIB bruto. Asimismo, apuntó que el endeudamiento público de la Junta se sitúa en niveles medios-bajos en relación a otras comunidades.

Respecto a las obligaciones que no están imputadas en el presupuesto por estar pendiente de pago, alcanzan los 3.035 millones de euros, de los cuales 523 millones corresponden a la Junta y 2.500 millones a las agencias administrativas. Además, de estos 2.500 millones, 2.070 millones son específicamente del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

En cuanto a las entidades empresariales, la deuda era de 5.186 millones, casi un 12% más respecto al año anterior, con unas pérdidas de 2,4 millones de euros, un dato mejor que en 2010 cuando perdieron 102 millones.