La Consejería de Educación ha puesto en marcha el procedimiento para contratar a nuevos monitores que lleven a cabo funciones de apoyo administrativo en los colegios de Infantil y Primaria de la comunidad autónoma, después de haber despedido a más de 840 el pasado mes de noviembre, una vez que les cumplió el contrato (algo más de un centenar trabajaban en centros de la provincia de Málaga). Sin embargo, esta oferta de empleo público la hará a través del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y no tendrá en cuenta la experiencia de quienes hasta ahora venían prestando servicio, como venían reclamando los afectados.

La Junta culpa a los sindicatos de esta situación, "al no haberse logrado la unanimidad deseada", informa en un comunicado enviado a los medios de comunicación. Y eso que el pasado 3 de diciembre, Educación había accedido a negociar una solución pactada para estos trabajadores de las oficinas de los colegios tras las numerosas manifestaciones que habían protagonizado. Los monitores afectados reclamaban la subrogación de sus contratos, teniendo en cuenta que durante los siete últimos años habían llevado a cabo este trabajo burocrático, indispensable en estos centros. El consejero Luciano Alonso apeló «a la complicidad con los sindicatos para llevar a cabo lo antes posible un plan de choque en el que se pueda contar con la experiencia de estos empleados, cuya labor ha sido, para la Junta, satisfactoria», como informó La Opinión de Málaga.

Sin embargo, estas negociaciones no han llegado a buen puerto y la Junta anuncia que contratará a los nuevos monitores administrativos antes de que comiencen los trámites de escolarización el próximo 1 de marzo, y reducir así las cargas burocráticas de los equipos directivos de los centros. Así que el plan de choque anunciado se quedará en la selección de personal mediante Oferta Genérica al SAE exigiendo los requisitos de titulación que, para la categoría de monitor escolar, recoge el VI Convenio Colectivo del Personal Laboral de la Junta de Andalucía y el Acuerdo de Titulaciones de 2005. Es decir, los aspirantes tienen que tener la titulación específica de Técnico Superior de Administración y Finanzas y de Animación Sociocultural, a pesar de que muchos de los que han perdido su puesto de trabajo y reivindicaban su reincorporación cuentan con carrera universitaria, además de los años de servicio y conocimiento de la tarea a realizar. "Educación lamenta la falta de unanimidad de las centrales sindicales que no han posibilitado esta modificación", asegura la Junta en la nota.

Este plan tendrá una duración de un año hasta que se creen las plazas en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y se puedan cubrir con personal propio de la Junta de Andalucía.