­Las cifras no pueden ser más desalentadoras para el sector de la construcción. Hace tan solo siete años, en la provincia de Málaga se visaban 45.660 viviendas mientras que el año pasado, el número de proyectos visados ascendía a sólo 904, lo que supone una caída de más del 98%. Si se observa el precio medio de la vivienda en la provincia también se ve la oscilación tan exacerbada de precios, situándose la cota más alta en 2007 con un promedio de 3.190 euros el metro cuadrado hasta los 1.484 del pasado 2013.

En esta tesitura, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, anunció ayer en Marbella una serie de medidas para reactivar el sector de la construcción, que ha registrado unas cifras de más de 600.000 despidos en toda Andalucía desde que comenzara la crisis económica.

La principal medida que va a poner en marcha la Junta de Andalucía es la reducción de los plazos de tramitación de los planes de ordenación de urbanismo. El Consejo de Gobierno aprobará en febrero un decreto para agilizar los trámites y la burocracia. «Tenemos que facilitar las iniciativas que busquen el desarrollo del territorio de manera sostenible y no suponer un freno para ello», señaló.

La presidenta explicó que el nuevo plan de acción y modelo territorial andaluz se basa en tres pilares fundamentales: la calidad de vida de los ciudadanos, el respeto por el medio ambiente y la apuesta por el progreso ligado a la innovación.

«Si se desarrollan las herramientas urbanísticas del Plan de Ordenación Territorial de Andalucía, se podrán evitar esos excesos que durante una época hemos visto en la Costa del Sol, que ha sido capaz de crecer, a veces equivocadamente, vulnerando, incluso, criterios urbanísticos establecidos», aseguró la presidenta.

«La sostenibilidad es el punto clave para las políticas que llevaremos a cabo en el presente y en el futuro», apuntó la presidenta. La Junta de Andalucía aboga por un cambio en el modelo económico y un concepto global de la sociedad en el que tienen que ser partícipes todos los municipios.

Para ello es importante mejorar el bienestar de los ciudadanos a través de una apuesta fuerte por los servicios públicos. «La sostenibilidad ha de tener una base local. La calidad de vida atrae inversiones e innovación y retiene talento y capacidad emprendedora» afirmó la mandataria andaluza. El Gobierno autonómico se compromete a intensificar las cotas de productividad y mejorar el crecimiento económico además del bienestar.

Profundizar en la identidad de cada municipio para potenciar la imagen del conjunto de Andalucía es otro de los pasos a seguir dentro de ese nuevo modelo más moderno y avanzado.

«Ciudades y entornos sostenibles exigen cambiar la forma de pensar, de actuar, de producir y también de consumir», apuntó Díaz, quien añadió que este compromiso «tiene que hacerse por el conjunto de la sociedad».

Para la mandataria andaluza, la base fundamental del desarrollo son los ciudadanos y aludió a la ley de medidas para asegurar la función social de la vivienda, que tiende a proteger el derecho más básico. «El crecimiento y la capacidad de crear empleo es compatible con la protección del entorno natural si entre todos trabajamos por ello» concluyó la presidenta, quien hizo estas declaraciones en el transcurso de la jornada inaugural de las «Jornadas sobre la Costa del Sol: hacia un nuevo modelo territorial», que concluyen hoy en Marbella y que pretenden sacar conclusiones sobre las nuevas fórmulas para un urbanismo sostenible.

Se da la circunstancia de que, precisamente, fue en Marbella donde hace una década se desbocó el urbanismo hasta tal punto que desembocó en la intervención del Ayuntamiento por parte de la Junta de Andalucía a raíz de los escándalos de corrupción urbanística puestos sobre la mesa. La actitud de la Junta entonces dio lugar a una serie de planes de ordenación del territorio que provocaron la paralización progresiva del sector de la construcción.

Ahora, el Gobierno autonómico quiere dejar todo ello atrás. «Andalucía tiene que volver a reactivar el sector de la construcción aprendiendo de los errores del pasado, corrigiendo lo que no hemos hecho bien pero impulsando un sector estratégico para la economía andaluza», apuntó Díaz.