­La corrupción y las medidas para atajarla anunciadas por la presidenta andaluza, Susana Díaz, centraron ayer el debate sobre el estado de la comunidad, junto a las críticas al Gobierno central y la certeza de la jefa del Ejecutivo de que habrá presupuestos para 2015.

La primera sesión del debate se prolongó durante tres horas y media, con la intervención de la presidenta y de los portavoces del PP e IU, a la espera de que hoy pronuncie su discurso el PSOE y se sometan a votación las propuestas de resolución de los tres grupos parlamentarios.

Las acciones impulsadas por la Junta para luchar contra la corrupción, el anuncio de 25 medidas en materia de empleo, transparencia y protección social para un cambio «profundo y duradero» y las críticas al Gobierno central fueron los ejes del discurso de Díaz.

Entre las medidas anunciadas, para las que no detalló ninguna consignación presupuestaria, destacó la puesta en marcha del Consejo de Transparencia y Protección de datos en el primer trimestre del próximo año, cuando también entrará en funcionamiento el Portal de la Transparencia, a través del que los ciudadanos podrán conocer los contratos y subvenciones otorgados por la Junta. El objetivo, detalló, es que la totalidad del dinero público «quede bajo el escrutinio de cualquier ciudadano en un ejercicio de transparencia sin precedentes en España y en la mayoría de los países de Europa».

«O acabamos con la corrupción, con los corruptos, o la corrupción se convertirá en un lastre demasiado pesado para nuestra democracia», dijo Díaz, que subrayó que lo que hay que hacer es «dejar de lado las excusas y ponerse a la tarea».

La presidenta de la Junta, que en su intervención fue muy crítica con los recortes del Gobierno, anunció por otra parte que la Junta irá a los tribunales por el «incumplimiento de la Ley de Financiación» de las comunidades autónomas. Elevó a 8.000 los millones de euros que considera que Andalucía ha dejado de recibir en los últimos años, ya que cifró en 2.300 millones lo que ha dejado de invertirse por el «incumplimiento escandaloso» del Estatuto y en más de 5.900 millones en concepto de liquidaciones del sistema de financiación.

Anunció también que antes de final de año concluirán los trabajos del grupo de expertos para la reforma del sector público instrumental y, después de transmitir su reconocimiento a los empleados públicos de Andalucía, recordó su compromiso de que recuperarán íntegramente sus pagas extra a partir del próximo año.

En materia de empleo, avanzó la puesta en marcha de tres nuevos planes centrados en la construcción sostenible, el apoyo al trabajo indefinido y el «retorno del talento».

Dijo, además, que propondrá al Parlamento una modificación de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) para regularizar las viviendas construidas «hace mucho tiempo» en suelo no urbanizable y para las que ha prescrito el plazo para restituir la legalidad.

En el ámbito de la sanidad, aseguró que el 1 de octubre se pondrá en marcha el Plan de Mejora en las Áreas de Urgencias Hospitalarias, con el objetivo de garantizar que los pacientes no esperen más de cinco minutos desde que acuden al hospital hasta que se analiza su gravedad.

Durante su intervención, la presidenta tuvo un lapsus cuando al hablar de algunas medidas en materia de justicia afirmó: «Desde que el PP preside el Gobierno de Andalucía...», lo que provocó la sonrisa incluso -desde la tribuna de invitados- del presidente del PP-A, Juanma Moreno.

La intervención de la presidenta de la Junta, que abrió en torno al mediodía el debate sobre el estado de la comunidad, se prolongó durante 52 minutos, una duración inferior a lo habitual en este tipo de sesiones, que además contó con una menor asistencia de invitados, pese a que habían sido confirmados hasta un centenar.