­«Nosotros somos los que mantenemos los principios iniciales de Podemos vivos, aunque siempre se dirijan a nosotros como la alternativa». Con estas manifestaciones de Rocío Filpo, una de los más de 60 miembros del partido de Izquierda Anticapitalista -ahora Anticapitalista a secas-, que han sido expulsadas, supuestamente por mostrarse críticos con los recientes acontecimientos que involucran a Podemos en Andalucía. Así, se cristaliza la posibilidad de que el partido esté optando por atajos o que prescinda de procesos considerados imprescindibles por parte de la militancia base a la hora de armar su estructura orgánica en Andalucía.

Hay que recordar que el partido del carismático Pablo Iglesias está envuelto ahora mismo en un proceso para despejar la incógnita de quién se convertirá en secretario general de Podemos en Andalucía. Un proceso que tuvo que ser aplazado por la decisión de Susana Díaz de adelantar las elecciones.

En declaraciones a este periódico, Filpo aseveró que el procedimiento de expulsión del partido Anticapitalista, integrado en Podemos, responde al debate y a las tensiones creadas en el feudo interno del partido, tras confirmar que estos militantes integran la lista alternativa para disputarle el liderato en Andalucía a Teresa Rodríguez. «Nosotros siempre hemos manifestado una posición más crítica, que tiene el respaldo de muchos militantes base», aseguró Filpo, número uno de Andalucía desde Abajo.

Los integrantes de esta lista, que pretende plantar cara a la vía oficialista, ya se opusieron al pacto entre Pablo Iglesias y Teresa Rodríguez, por el cual ambos se repartieron la potestad de colocar en lista a los candidatos de Podemos para las pasadas elecciones autonómicas. Andalucía desde Abajo estaría formada no sólo por miembros de Anticapitalista, sino que responde a la integración de diversos movimientos sociales que se gestaron en torno a una corriente alternativa en Podemos que siempre ha abogado por contar con toda la militancia para la toma de decisiones.

Los miembros descartados de Anticapitalista, además, denuncian una actitud «autoritaria» y «antidemocrática», ya que la expulsión se habría realizado al margen de los pasos que precisan los estatutos para tales casos. «No han seguido los cauces previstos en los estatutos de la formación estatal», apuntó Filpo. A pesar de estos contratiempos, esta malagueña insistió en su intención de plantarle cara a Teresa Rodríguez.