La secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, subrayó anoche que será presidenta de la Junta en la nueva legislatura «porque lo quieren las urnas», tras lo que dijo esperar que no la boicoteen el resto de los partidos. «Voy a ser presidenta porque lo quieren las urnas, y eso no te lo quita nadie, eso te da la fuerza, y ahora lo que espero es que los demás no me boicoteen», dijo en un acto público en la localidad sevillana de La Puebla del Río. Insistió en que espera que el resto de los partido le dejen «trabajar ya».

Horas antes, Díaz ofreció en otro acto diálogo a todos los partidos y todos los representantes sociales de Andalucía para abrir un «nuevo tiempo» político. La presidenta indicó que dentro de la sesión de investidura que arrancará el próximo lunes planteará cuatro bloques a las fuerzas políticas. El primero de ellos es el empleo, sobre todo «para recuperar esa brecha salarial», y el segundo la regeneración democrática, «porque los ciudadanos tienen derecho a poder confiar en sus instituciones, que tienen que ser ejemplares y transparentes». El tercero de esos bloques es blindar el estado de bienestar, con una sanidad que «garantice su carácter público a través de la ley», y una ley de dependencia que «es además el empleo de miles de mujeres». Por último, como cuarto bloque planteará la financiación, porque «sin una financiación adecuada no se puede mantener la cartera de servicios que requieren los ciudadanos si quieren tener igualdad de oportunidades».