Más de 900 efectivos para luchar contra los incendios forestales

Así lo ha asegurado el delegado, que ha analizado el dispositivo de lucha contra incendios para la temporada de 2015, que está operativo desde el pasado 15 de junio. Sanz ha explicado que el Estado interviene en los incendios forestales en apoyo de la comunidad autónoma, que lucha contra los incendios a través del Infoca, tanto en los niveles nacionales (2 y 3), como aquellos que sean de la comunidad (0 y 1) y requieran apoyo del Estado.

Ésta es, además, la primera campaña en la que se aplica el Plan Estatal de Protección Civil para emergencias por Incendios Forestales 2015, que "mejora significativamente" el nivel de coordinación entre administraciones y establece tres fases operativas en función de la gravedad potencial de un incendio forestal: fase de alerta y seguimiento, fase de gestión operativa y fase de emergencia de interés nacional.

A este respecto, Sanz ha destacado la importancia de la colaboración institucional en una temporada "con alto riesgo de incendios", debido al déficit hídrico, a la falta de lluvias y a las altas temperaturas. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé que este verano sea un 40 por ciento más caluroso que el año pasado. Por eso, el delegado también ha llamado a la colaboración ciudadana, pues "la mejor estrategia para actuar contra los incendios forestales es, sin duda, evitar que se produzcan".

Sanz ha explicado que la implicación del Estado en la Campaña Contra Incendios está presente a través de los Ministerios del Interior, Defensa y Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama), que aporta cinco medios aéreos que tienen ubicada su sede en Andalucía, por lo que pueden actuar "de forma inmediata" para apoyar a la comunidad en el momento que se alerta del incendio.

Estos aviones y helicópteros cuentan con capacidades de descarga de agua que van desde 5.500 litros de los dos anfibios que hay con sede en Málaga, hasta los 4.500 litros de los helicópteros Kamov, ubicados en La Almoraima de Cádiz o Huelma de Jaén, o los 3.100 litros de capacidad del avión de carga en Tierra con base en Niebla, Huelva.

Por su parte, los efectivos de la Guardia Civil realizan tareas de prevención y coordinación durante el desarrollo del incendio. Además, el delegado ha destacado que "son muchas las investigaciones que realizan cada año sobre la casuística de los incendios". Para la temporada de 2015, casi 300 agentes participan en el dispositivo de lucha contra incendios, distribuidos en las 71 patrullas del Seprona y los 25 equipos de ROCA y los 14 equipos de investigación que, de forma constante y fija, trabajan tanto en la prevención como en el desarrollo de un incendio.

A este respecto, Sanz ha subrayado "la labor de vigilancia preventiva" que realizan los agentes de la Guardia Civil, especialmente en zonas de alto valor ecológico, donde los agentes de Seprona controlan la entrada de vehículos, caravanas y excursionistas, así como la labor de impedir que se realicen barbacoas en estas épocas de especial riesgo de incendios.

De hecho, como ha recordado el delegado, "el 96% de los incendios forestales tienen su origen en las actividades que se realizan durante el tiempo de ocio en el campo o en el monte".

Sanz también ha indicado que precisamente durante 2014, la Guardia Civil consiguió esclarecer 64 casos de incendios de los 268 producidos, lo que implica un esclarecimiento del 28,3 por ciento de los casos investigados. La labor de investigación se saldó con 21 imputados y, durante los incendios, un total de 836 personas y 440 viviendas evacuadas.

El 20 por ciento de los efectivos nacionales de la UME se concentran en el II Batallón de la BIEM de Morón de la Frontera, que tiene activado desde junio seis secciones, integradas por un total de 625 militares, cuatro helicópteros Coger y 161 vehículos, de los que 39 son autobombas, once nodrizas, 15 vehículos de telecomunicaciones y cuatro ambulancias de soporte vital avanzado.

Sanz ha explicado que en el momento que se requiere la presencia de la UME en un incendio forestal acude una unidad de intervención, compuesta por 50 militares, así como seis vehículos autobombas y dos nodrizas. La dotación va en aumento en función de la evolución del incendio, hasta un total de 300 efectivos.

La UME interviene con carácter de urgencia una vez declarado el incendio y con nivel 2. No obstante, tras los nuevos convenios, la UME, tras autorización de las subdelegaciones y Delegación de Gobierno podrá desplegarse en el nivel 1 sí así es requerido por el Operativo del Gobierno Autonómico.

Por su parte, la Dirección General de Tráfico (DGT) controla el territorio andaluz con el helicóptero Pegasus y emitirá alerta en caso de conato de incendio. Asimismo, emitirá anuncios dirigidos a los conductores, en el que se les recuerda la necesidad de extremar las precauciones por alto riesgo de incendio, advirtiendo que está prohibido tirar colillas, entre otros mensajes, a través de paneles luminosos en las carreteras y redes sociales.

Asimismo, la Aemet participa en el dispositivo suministrando puntualmente información sobre el peligro de incendios, a través de boletines y mapas de riesgo meteorológico y de incendio, que clasifican el riesgo en cinco estratos (bajo, moderado, alto, muy alto y extremo).

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias realiza las actuaciones de información y coordinación y pone a disposición el sistema de detección satelital, a partir del cual se pueden realizar simulaciones de los incendios detectados, y que este año se ha visto reforzado con sensores nuevos que ofrecen mayor resolución espacial y temporal. Igualmente, coordina la aportación de medios internacionales a través del Mecanismo de Protección Civil de la Unión Europea.

Del mismo modo, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) está invirtiendo más de 7,5 millones de euros en ocho proyectos para actuaciones preventivas contra incendios forestales y lucha contra el cambio climático en los montes propiedad de este organismo localizados a lo largo de toda la cuenca del Guadalquivir, con el objetivo de garantizar la persistencia de masas forestales, y facilitar, además, el acceso a los medios de extinción en caso de incendio, la realización de cortafuegos, líneas de defensa y otras infraestructuras de prevención, etcétera.

Por último, el delegado ha pedido a los ciudadanos que, ante la gravedad del peligro de los incendios, se sigan las recomendaciones de Protección Civil, como prestar atención a las normas de la comunidad sobre prevención de incendios y periodos autorizados para quemas de rastrojos; evitar arrojar cigarrillos, basuras y, especialmente, botellas de vidrio, que hacen efecto lupa con el sol; y no encender fuegos u hogueras en el monte y terrenos próximos. Además, ha recordado que sólo se debe acampar en zonas autorizadas y ha insistido en la necesidad de avisar al 112 cuando se detecta un fuego.