Los trenes turísticos de Renfe (Transcantábricos, Al Andalus y Expreso de la Robla) inician la temporada avalados por el éxito de campañas anteriores en las que, con gran afluencia de público, alcanzaron los 7 millones de euros de facturación, una cifra que prevé ser superada este año. El Al Andalus comenzó el pasado 4 de abril su primer viaje en Sevilla, mientras que los Transcantábricos los iniciaron ayer (el Gran Lujo desde San Sebastián a Santiago y el Clásico desde León a Santiago).

Las reservas para la temporada 2016 son optimistas. El Transcantábrico Gran Lujo se mueve ya en niveles de ocupación del 73%, mientras que el Clásico está en torno al 57%, y el Al Andalus en el 53%. En 2015, el Al Andalus recibió a 800 viajeros, alcanzando una ocupación del 74%.

El Al Andalus, que realizará rutas por Andalucía, Extremadura y a Santiago de Compostela, se compone de cuatro coches salón de los años 20 y siete coches suite. Cuenta con capacidad para 64 personas alojadas en sus 32 suites de tipo estándar o superior. Este tren dispone de su propia biblioteca, salones de lectura de revistas y prensa diaria.