Alrededor de 500 personas se manifestaron ayer por el Centro de Málaga en protesta por el conflicto del instituto de Benamocarra, en una marcha que empezó desde la calle Larios hasta llegar al edificio de la Subdelegación del Gobierno, en el que la asociación de padres y madres del IES La Maroma dejó un escrito para instar a que se busque una solución inmediata a este asunto.

Los convocantes exigen que se retire el precinto del centro, que fue ordenado por el Ayuntamiento de la localidad alegando deficiencias estructurales del edificio. Desde el Ampa critican que sus hijos estudien en las aulas prefabricadas de Torre del Mar, defendiendo el buen estado de las instalaciones educativas de Benamocarra. Los padres volverán a concentrarse el próximo miércoles por la calles del pueblo benamocarreño, partiendo desde el instituto La Maroma.

Son nuevas movilizaciones protagonizadas después del enésimo fracaso a la hora de intentar llegar a un acuerdo entre la Delegación Provincial de Educación y el Ayuntamiento de Benamocarra, que se ampara en un auto judicial que impide entrar en el instituto. Ni siquiera la mediación del presidente de la Diputación, Elías Bendodo, ha servido para levantar el precinto, así que los estudiantes siguen sin poder disfrutar de estas instalaciones docentes.

Por su parte, el consejero andaluz de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, anunció ayer que un funcionario de la Junta acudirá cada día a las nueve de la mañana al instituto La Maroma a esperar que el alcalde, Abdeslam Lucena), levante el precinto de las instalaciones.

Álvarez de la Chica se reunió ayer con representantes de los padres de los alumnos del centro, que acoge a doscientos alumnos de Benamocarra, El Borge, Almáchar e Iznate y fue precintado el pasado 22 de enero por el Ayuntamiento alegando «deficiencias estructurales» corroboradas por informes del Consorcio Provincial de Bomberos. El titular de Educación ha declarado a los periodistas que sigue «a diario» el caso y está «bastante contrariado" por esta situación «absolutamente injustificada». «Hablamos de un alcalde que, como cualquier servidor público, debe solucionar los problemas, no darlos, que es para lo que la gente nos elige y nos paga con sus impuestos», añadió Álvarez de la Chica.

Ha apuntado que el caso es «algo inaudito», porque Benamocarra cuenta con «un equipamiento que quisieran tener muchos municipios de Andalucía con esa calidad» y el alcalde mantiene «la actitud del perro del hortelano, que ni come ni deja comer».

«En el fondo, lo que está sucediendo es una venganza del actual alcalde contra el anterior, y las venganzas siempre son malas consejeras, pero si la pagan injustamente quienes no lo merecen, los chicos que deben desplazarse todos los días, parece poco presentable», señaló el consejero.

También pidió al alcalde que «no ponga más excusas», porque la Junta tiene «el dinero preparado para hacer lo que sea necesario inmediatamente», después de haber hecho «lo más importante, que es construir el instituto y pagar a los profesores, que es lo más caro».

«Poner un precinto y no dejar entrar para saber lo que hay que hacer y hacerlo inmediatamente no es el camino», advirtió Álvarez de la Chica, que agregó que se trata de un «mal ejemplo» y espera que los ciudadanos de Benamocarra «tomen nota de a quién han puesto al frente del Ayuntamiento». En su reunión de ayer, el consejero trasladó a los padres su «compromiso, apoyo y solidaridad» y su deseo de que «la presión social haga replantearse algo inadmisible».

El alcalde de Benamocarra, Abdeslam Lucena, afirmó ayer que respetar la ley «no es actuar con venganza», respondiendo así a las declaraciones efectuadas por el consejero. Así, señaló a través de un comunicado, que en el Estado de Derecho «prima el principio de legalidad y han sido dos juzgados de lo Contencioso-Administrativo, el número siete y el tres de Málaga, los que han dado la razón al Ayuntamiento en el tema del precinto» del centro educativo.