Ni la partida suelta ni las diferentes obras previstas por Acuamed. Los más de 14 millones que destinan los Presupuestos Generales del Estado a la depuración de las aguas de la provincia no han conmovido al Foro del Saneamiento Integral de la Costa del Sol, que sigue empeñado en denunciar a la Junta y al Gobierno por el incumplimiento de los compromisos adquiridos en materia de infraestructuras.

Según Salvador Vilches, responsable del colectivo, el documento aprobado por el equipo de Rajoy no sólo no satisface las aspiraciones del sector empresarial y turístico, sino que, además, deja fuera proyectos esenciales para solventar las carencias del sistema de tratamiento de aguas de la provincia, que lleva treinta años pendiente de completar sus instalaciones básicas. Es el caso, señala, de la depuradora de Nerja, que, según el PP, comenzará a construirse el próximo año. Una promesa que no convence a los integrantes del foro, que califican de «lamentable» la ausencia de «una partida en firme» para los próximos doce meses. «Es una obra indispensable que tenía que estar terminada en 2009; el pasado julio la ministra Rosa Aguilar dijo que se haría sí o sí. Seguimos esperando», precisa.

Junto a la depuradora, la plataforma pone el acento en otras obras, algunas proyectadas en la década de los noventa, y entre las que destaca la estación de Guadalmansa o la nueva central de tratamiento de Málaga. El colectivo, disconforme con el programa de presupuestos, se mantiene en su intención de acudir a los tribunales por el retraso de las instalaciones previstas entre 2006 y 2012. Vilches calcula que la denuncia, anunciada por la vía civil, con el patrocinio de la patronal hotelera, podría interponerse en un plazo de cuatro semanas.

El foro insiste en que el saneamiento de las aguas resulta esencial para los intereses de la Costa del Sol, que se enfrentará en los próximos años al doble reto de responder a la crisis y a la energía de sus nuevos competidores, tanto nacionales como extranjeros. Por ahora, puntualiza el colectivo, se complica la posibilidad de cumplir con los plazos establecidos por la Unión Europea, que exige alcanzar el vertido cero en 2015.

Unos 500 millones para 30 años de queja. La reivindicación se califica de histórica. Lleva más de treinta años en la agenda de las administraciones, pero, de momento, ninguna ha sabido emprender el movimiento definitivo para subsanar las deficiencias. El saneamiento integral de la Costa del Sol, un problema que ha cruzado el siglo, con su último tercio de bonanza económica, está todavía lejos de perfilar su red de infraestructuras básicas. A la depuradora de Nerja, tasada en alrededor de 43 millones, se unen las de Guadalmansa y Málaga norte, además de una serie de colectores y reformas de las conducciones. En total, según el foro, un gasto de alrededor de 520 millones, lo que equivale a casi un treinta por ciento más del conjunto de la inversión anotada para la provincia en los últimos presupuestos.

La cantidad, sin embargo, tiene su letra pequeña, y es a esta a la que se aferra el foro, al que se le unen empresarios, constructores y analistas turísticos de Málaga. El saneamiento no es un capricho y sus movimientos están previstos desde hace décadas, lo que, según la plataforma, neutraliza cualquier tipo de excusa por parte de las administraciones. «Estamos hablando de obras esenciales, necesarias para competir y que deberían estar hechas desde hace años», señala Salvador Vilches, coordinador del foro. La plataforma que reivindica la puesta a punto de las infraestructuras hidráulicas de la Costa del Sol reúne a agentes del sector turístico y de otras organizaciones, incluidos empresarios y sindicatos.