La Diputación Provincial de Málaga ha finalizado el proceso de recolocación de los usuarios y trabajadores de la residencia de mayores Los Montes, ubicada en el municipio de Colmenar, tras decretar el cese de la actividad el pasado 17 de agosto. Los 15 mayores que se encontraban en el centro permanecen ahora en la residencia La Vega de Antequera y en la de San Carlos de Archidona, ambas gestionadas por el ente provincial.

Así, la gran mayoría de usuarios, once en total, se encuentran en el municipio antequerano, mientras que otros cuatro han sido trasladados a Archidona. Su traslado se ha producido en función de sus propias preferencias, tras haber visitado ambas instalaciones acompañados de sus familiares.

El primer traslado tuvo lugar el jueves 23 de agosto, cuando cuatro usuarios se mudaron a San Carlos. El martes de la semana pasada se procedió al desplazamiento de otras tres personas, las de movilidad más reducida, a la residencia La Vega, para lo cual fue necesario el uso de un transporte especial del parque móvil de la Diputación. El miércoles 29, otros cuatro usuarios fueron trasladados al centro de Antequera, y el viernes finalizó el realojo con el traslado de los últimos beneficiarios a dichas instalaciones.

La vicepresidenta tercera de la Diputación de Málaga y responsable del área de Derechos Sociales, Ana Mata, señaló que con esta medida «se garantiza una mejor atención a estas quince personas en sus nuevos destinos». Mata indicó que «se cumple así el compromiso adquirido por la Diputación de ampliar la calidad del servicio ofrecido a los beneficiarios y también de mantener todos los puestos de trabajo sin excepción».

Los 26 empleados de la residencia Los Montes de Colmenar continuarán trabajando en diferentes servicios de la Diputación. Veintidós de ellos están reubicados desde el sábado y los cuatro restantes lo estarán el día 8 de este mes. Los destinos serán los centros de La Vega y San Carlos, los centros Virgen de la Esperanza y Guadalmedina, el Centro Provincial de Drogodependencias, el Centro Infantil y el área de Arquitectura y Urbanismo.

La clausura del edificio responde a los informes negativos que tenía al no adaptarse a la normativa, así como el elevado coste de mantenimiento, de cerca de 1,5 millones de euros.