El Gabinete de Estudios de la Naturaleza de la Axarquía, GENA-Ecologistas en Acción, ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente la autorización otorgada por la Junta para implantar un negocio de hamacas y sombrillas en la cala de El Cañuelo, situada en el Paraje Natural de los Acantilados de Maro y Cerro Gordo, un permiso que, a juicio del colectivo, puede constituir un delito contra la conservación de los espacios naturales.
El presidente de GENA, Rafael Yus, ha considerado que dicha autorización es resultado "de una presión continua" hacia las instituciones ambientales autonómicas por parte del Ayuntamiento de Nerja, localidad donde se ubica la citada cala, "para poder acceder al Paraje Natural de los Acantilados de Maro y Cerro Gordo para su explotación como recurso turístico para el municipio".
Yus ha recordado en un comunicado que, tras muchos años de denuncias constantes sobre la masificación de vehículos y bañistas y sobre la permanencia de autocaravanas durante todo el año en el paraje natural, la Junta cortó hace unos años el camino de acceso rodado a las calas, permitiendo sólo el descenso a pie o en un vehículo oficialmente habilitado.
A juicio del colectivo ecologista, ante esta decisión los propietarios de fincas de los acantilados y algunos empresarios de chiringuitos y de negocios de buceo "presionaron al Ayuntamiento de Nerja para que exigiera a la Junta permitir este tipo de actividades".
Según GENA, dichas peticiones fueron "sistemáticamente rechazadas" por el Gobierno andaluz basándose en la propia legislación de los espacios naturales, "que establece unas condiciones mucho más restrictivas para los parajes naturales, que de ningún modo se pueden equiparar a los parques naturales, donde la actividad de ocio está más permitida en lugares de bajo impacto".
Sin embargo, y pese a dichas restricciones legales, "para nuestra sorpresa recientemente hemos tenido noticia de que la Delegación Provincial de Medio Ambiente de Málaga ha autorizado la instalación de un negocio de explotación de hamacas y sombrillas en El Cañuelo, en el corazón del Paraje Natural".
Por ello, GENA ha presentado denuncia ante la Fiscalía "por supuesto delito ambiental, ya que dicha autorización contraviene la legislación vigente sobre parajes naturales, a lo que añadimos la legislación sobre otra figura que tiene este paraje, la de Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (Zepim)", que también establece "serias restricciones" a la puesta en marcha de actividades en estos lugares.
"Consideramos que esta actividad, además de contravenir la ley, establece una vía de entrada para futuras explotaciones como chiringuitos y embarcaciones de recreo, pues los mismos principios que han permitido autorizarla se extenderían, por universalidad del derecho, a los demás negocios, convirtiendo los acantilados en un nuevo balneario, cuando incluso su utilización actual ya es seriamente criticable", ha finalizado Yus.
El Paraje Natural de los Acantilados de Maro y Cerro Gordo, que obtuvo esta catalogación en 1989, se extiende por 1.814 hectáreas entre los términos municipales de Nerja y Almuñécar (Granada), y está incluido en el Inventario de Espacios Protegidos de Andalucía.
