El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente adjudicó ayer las obras y la redacción del proyecto de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Nerja, una de las 47 obras que quedan por acometer en la provincia de Málaga para completar el saneamiento integral.

El alcalde de Nerja, José Alberto Armijo (PP), explicó ayer que la empresa adjudicataria es la UTE Corsan-Corviam-Isolux, con un presupuesto de 23,2 millones de euros, de los que 153.000 se destinarán a la redacción del proyecto, con un plazo de ejecución de treinta meses.

El regidor recordó que, una vez firmado el contrato, hay tres meses de plazo para que la UTE presente el proyecto definitivo en el Ministerio y, tras aprobarse técnicamente, se podrán iniciar las obras.

Armijo afirmó que la adjudicación de la depuradora de Nerja es «una excelente noticia que pone de manifiesto que el Gobierno de España está definitivamente comprometido con este proyecto, que va a significar un importante avance desde el punto de vista medioambiental y turístico».

Armijo quiso acallar las críticas de la oposición municipal acerca de una supuesta falta de fondos para esta obra, y añadió que si se ha adjudicado es porque hay créditos comprometidos en el Ministerio y una financiación garantizada.

La nueva depuradora está diseñada para una población de 100.000 habitantes en temporada alta, ya que podrá tratar un caudal medio diario de 25.000 metros cúbicos, se ubicará en el arroyo de la Fuente del Badén, al norte de la carretera N-340, y ocupará una superficie de 28.999 metros cuadrados.

El proyecto también prevé un cambio de ubicación de la estación de bombeo de aguas residuales de Burriana unos 100 metros al norte del emplazamiento diseñado en el anteproyecto inicial para evitar la ocupación marítima terrestre y un pequeño desplazamiento de la del río Chíllar unos 70 metros aguas arriba.

La construcción de las instalaciones previstas se desarrollará en su mayor parte en un entorno urbano, por lo que los impactos sobre el medio hídrico y el paisaje «son mínimos», según el Ministerio.

Como ya anunció La Opinión de Málaga, el viernes pasado, el sector andaluz del agua denunció que es muy difícil cumplir con el plan de depuración de aguas que exige la Unión Europea para 2015, ya que restan por ejecutar 47 proyectos de construcción, ampliación y mejora de instalaciones de saneamiento por un importe de 370 millones de euros y de los que apenas se ha avanzado nada en los dos últimos años.

En previsión de las sanciones económicas que Bruselas impondrá por incumplir este plan, el sector del agua ha ofrecido su colaboración a las administraciones para ejecutar un plan de inversiones en varios años que permitan terminar todas las obras pendientes.