El Ayuntamiento de Vélez Málaga ha finalizado la rehabilitación del antiguo camarín de la Virgen de los Desamparados, un monumento que fue construido a finales del siglo XVII en un antiguo cuarto de guardia que protegía la muralla de la ciudad árabe, y que se inaugurará de forma oficial este sábado. El camarín era el lugar al que miraban los ajusticiados antes de ser ejecutados durante la época de la ocupación francesa.

La concejala de Empresa y Empleo del Ayuntamiento veleño, Lourdes Piña, señaló que esta actuación se ha incluido dentro del Plan Municipal de Recuperación Patrimonial Recupera 2011-2015 y que ha sido financiada a través de los fondos de Iniciativa Urbana del plan Toda la Villa (Plan Urban), para dinamizar el casco histórico de la ciudad. La inversión de esta actuación ha sido en torno a los 37.000 euros.

Piña informó de que el inmueble sufría desde la década de los años 80 problemas de humedades y falta de ventilación, por lo que la Pontificia y Muy Antigua cofradía de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto y María Santísima de los Desamparados tuvo que reubicar su Sagrado Titular en el Convento de San Francisco, que actualmente es la sede canónica de la hermandad veleña y la cual procesiona oficialmente los Miércoles Santos.

En la hornacina contarán además con una representación de la Virgen, a través de una imagen alegórica que ha sido creada por el escultor veleño José Casamayor, «ya que la talla original es antigua y consideramos que no era conveniente que estuviera en dicho lugar», según señaló el teniente hermano mayor de la cofradía de los Desamparados, José Antonio González Espejo. La talla está realizada en resina para aguantar mejor las humedades y en policromía, y se habilitará una malla para evitar su deterioro y garantizar además la seguridad de la imagen.

González Espejo señaló que dentro de los actos inaugurales se procesionará la talla original de la Virgen de los Desamparados desde el convento de San Francisco. Después tendrá lugar una ceremonia litúrgica por parte del párroco Francisco Sánchez en la plaza de la Constitución, a lo que le seguirá posteriormente una exaltación de la imagen del catedrático Antonio Garrido Moraga, unas palabras del alcalde de la ciudad, Francisco Delgado Bonilla, y la bendición de la réplica que se colocará en esta nueva hornacina.

Además de servir como cuarto de guardia de la Puerta Real de la Villa, el camarín de los Desamparados, remodelado en 1789, cobró especial protagonismo durante la ocupación francesa. En este periodo el habitáculo estaba ocupado por la talla mariana, dedicada en principio a la advocación de la Virgen de la Concepción.