Las cofradías de todo el arco Mediterráneo siguen peleando para contar con una redes acordes a la pesca de arrastre en la zona. Así se lo trasladaron ayer en un encuentro que tuvo lugar en Madrid a los técnicos del sector pesquero de la Unión Europea, en el que solicitaron que se les aplique una excepción a las redes impuestas por la nueva ley comunitaria y les permitan usar aquellas con las que trabajaban hasta ahora.

A la reunión asistieron el presidente de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo, Gabriel Mato, y el secretario general de Pesca, Carlos Domínguez. Precisamente, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha remitido a Bruselas un dossier sobre las incidencias en las capturas con las mallas actuales, debido a la reducción del grosor de los hilos; que pasaba de unos cinco a tres milímetros.

Cada cofradía remitió un escrito al Ministerio aportando documentación gráfica y estadística sobre la incidencia de la medida; tanto en la reducción del volumen de pesca en la mar como sobre los daños que están produciendo a las especies marinas, al partirlas por la mitad.

El puerto de Caleta de Vélez en Vélez Málaga ha sido uno de los más afectados por este cambio desde octubre, donde se contabilizan cerca de veinte embarcaciones de arrastre del medio centenar que hay en la provincia; que recogen chopitos, gambas o calamaritos.

José Luis Guerrero, patrón mayor de la cofradía y vicepresidente de la Federación Provincial de Pescadores en Málaga, destacó ayer «que de momento ha habido una buena recepción y tienen en cuenta nuestro problema. Han recibido las alegaciones con la documentación de las distintas cofradías y ya están en Bruselas».

Guerrero añadió que dentro de dos o tres meses podrían recibir una respuesta sobre si la UE permite hacer una excepción en la zona, coincidiendo con la próxima reunión de la Federación Nacional de Pesca. «Son unas mallas que en otros mares funcionan, pero no aquí», resaltó el patrón mayor, debido a que las tallas mínimas en estas costas son inferiores en comparación con otros países del norte europeo; por lo que aquí los peces escapan entre los huecos.

«Nosotros ya le hemos planteado nuestro problema y, para ello, se le ha presentado diversa documentación de cada zona. Por eso esperamos que nuestra petición siga adelante», señaló Miguel Carmona, presidente de la Federación de Pescadores en Málaga.

Los pescadores ya llevan ocho meses usando las actuales mallas, lo que está provocando una reducción en las capturas de cerca del 50% respecto al período anterior. De hecho, el Ministerio les anunció que antes de enero de este año observadores comunitarios se acercarían, bien al puerto de Caleta de Vélez o al de Fuengirola, para comprobar los trabajos de pesca en el litoral malagueño. Pero estas visitas no se produjeron, por lo que cada cofradía tuvo que elaborar su propio informe y enviarlo a Bruselas, vía Madrid.

@JuanjoZayas