«Es peor que cuidar a un niño. Tener la experiencia de tener a tu cargo a una persona con Alzheimer te hace ser consciente de lo duro que llega a ser este trabajo. Es muy importante esta novedosa iniciativa de Málaga Acoge, darnos titulación, aunque sea elemental, a tantas personas de fuera que estamos trabajando aquí en España como cuidadores».
Este el testimonio de la boliviana Lourdes Gumucio. Lleva ocho años en la Costa del Sol y subraya «que la gente, en general, no llega a imaginar lo que cuesta la atención» a quien padece una demencia.
Con la participación de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y Otras Demencias de la Axarquía (Afadax) y la Residencia Senior, de Torre del Mar, donde se realizarán las prácticas que acaparan la mitad de este ciclo formativo, Málaga Acoge manifiesta que ante el actual marco de recortes «no queda más remedio que implicar a empresas o colectivos en la formación». La orientadora laboral de la ONG para la Axarquía, Patricia Herrera, agrega que existe una alta demanda para formar a inmigrantes en este sector y «no se descarta que antes de que acabe el año se imparta otro».
De momento, más de una docena de ciudadanos de diversas nacionalidades participan en un curso de Atención Especializada a Enfermos de Alzheimer, con la supervisión de la Consejería de Salud. Ismael Almanzor, presidente de Afadax, destacó ayer que siempre «que sea posible» ofrecerá a Málaga Acoge el personal que trabaja para su asociación. «En estos tiempos de crisis, en los que hemos perdido casi todas las subvenciones y ayudas de las administraciones, es más necesario que nunca colaborar entre todos», explicó.
La presidenta de Málaga Acoge, Adela Jiménez, entabló precisamente un intenso debate con las responsables sanitarias de la comarca de la Axarquía y acusó a la Junta de denegar la tarjeta sanitaria en muchos centros de salud a inmigrantes, pero las portavoces del Distrito Sanitario de la Costa del Sol Oriental afirmaron que la propia ONG, (C/ Los Prados, número 2, Torre del Mar) les traslada estos casos y «automáticamente se reparan».
Parte del alumnado de este novedoso curso de atención a enfermos denunció ayer a este periódico esas «dificultades» que sufren desde la llegada de la crisis para ser atendidos en determinados servicios públicos y a pesar de los años que acumulan «cotizando a la Seguridad Social».
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