La Fundación Cueva de Nerja, que rige el monumento natural, ha despedido al conservador de la cavidad, Antonio Garrido, por una falta disciplinaria de carácter "muy grave por abuso de confianza en las gestiones encomendadas, deslealtad y transgresión de la buena fe contractual".

La Fundación ha explicado en un comunicado que se ha acreditado que Garrido ha manipulado la información recibida como miembro de los órganos de gobierno, "con manifiesta intención de causar daño a la imagen y prestigio de la Cueva de Nerja, difamando a la misma y creando un clima generalizado de crispación en la plantilla".

La decisión se ha tomado por mayoría en la junta plenaria de la Fundación, una vez estudiado el expediente incoado y escuchadas las alegaciones del implicado, y se ha considerado la actuación del conservador "reprobable y sancionable como falta muy grave".

La resolución se adoptó con doce votos a favor, cuatro en contra y la abstención del instructor del expediente, que se ha basado en la condición de Garrido de miembro de la junta plenaria, de la comisión permanente y del Instituto de Investigación de la cueva. Asimismo, se le ha reprobado su actitud profesional como conservador y arqueólogo de la Fundación.

Por su parte, Garrido ha manifestado a Efe que el origen del conflicto está en una reunión que hubo el pasado diciembre entre los trabajadores y el gerente de la Cueva, Ángel Ruiz, para comunicarles la supresión de la paga extraordinaria, lo que originó la crítica del conservador.

En sus alegaciones, Garrido ha señalado que el expediente sancionador tenía como intención "crear un clima de pánico laboral", y ha asegurado que se formularon unos cargos contra él por unos hechos y se propuso una sanción por otros, "lo que resulta contrario al principio de defensa".

Ha negado que haya manipulado información de la Fundación, y ha afirmado que se pretende represaliarlo por haberse quejado al Defensor del Pueblo por la supresión de la paga de Navidad y por reunirse con los representantes sindicales para articular su defensa en el procedimiento.

El conservador también ha presentado alegaciones por la vulneración de derechos fundamentales como la libertad de expresión y la libertad sindical.