La consejera de Fomento y Vivienda de la Junta, Elena Cortés, se ha mostrado hoy convencida de que habrá un acuerdo con el Ayuntamiento de Vélez-Málaga para poner en marcha el tranvía de este municipio, suspendido desde junio de 2012 y cuyos vehículos han sido alquilados a Sidney (Australia).

Cortés, que ha visitado Vélez-Málaga para la firma de un convenio de rehabilitación de un inmueble, ha explicado en rueda de prensa que el objetivo de su departamento es que el tranvía vuelva a entrar en funcionamiento "porque hay que darle uso a las inversiones realizadas con dinero público".

La consejera ha afirmado que las negociaciones que se iniciaron a finales de julio entre el Consistorio y la Consejería de Fomento y Vivienda "van por buen camino", y ha precisado que la Junta estudiará con "rigor" las propuestas y los estudios presentados por la administración local.

Asimismo, ha aprovechado para reiterar la apuesta del Gobierno andaluz por la movilidad sostenible como servicio público y ha reclamado al alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla (PP), "más pedagogía del transporte público".

Por su parte, el regidor ha declarado que si existe voluntad institucional, "es el momento de dejarse de reproches partidistas, mirar el futuro y poner en marcha el tranvía cuando toque".

No obstante, Delgado Bonilla ha reiterado que la explotación del tranvía no puede ser una losa para la economía local, y ha recordado que el Ayuntamiento tuvo que suspender este transporte por el déficit que acumulaba el servicio, que habría aumentado con la entrada en funcionamiento de su segunda fase.

Ha asegurado que hay que estudiar las debilidades y puntos débiles del sistema, lastrado principalmente por la baja demanda de viajeros, y apostar por una nueva maquinaria, con convoyes más cortos, baratos y más adaptados a la realidad de Vélez-Málaga, que posibilitarían una rebaja de la tarifa técnica.

La propuesta del Ayuntamiento pasa por emplear unidades móviles de 23 metros, frente a las de 31 metros que acaban de ser alquiladas y trasladadas hasta Australia.

El tranvía, que ha supuesto una inversión de unos cuarenta millones, conectaba desde octubre del 2006 el casco urbano principal de Vélez-Málaga con el núcleo costero de Torre del Mar, en un trazado de 4,7 kilómetros, que debería haberse ampliado en una segunda fase de 1,2 kilómetros, que nunca entró en servicio.