Un hombre de 36 años ha sido detenido por la Policía en Vélez Málaga por los supuestos delitos de inducción a un menor al abandono de su domicilio, exhibicionismo y provocación sexual a través de la aplicación de mensajería instantánea Whatsapp.

La víctima era un chico de 13 años, residente en la provincia de Toledo, con el que el detenido había contactado por primera vez en noviembre de 2012 y al que enviaba mensajes en los que le manifestaba su intención de viajar hasta su lugar de residencia para recogerlo y trasladarse ambos a Málaga, "donde tendrían una vida inmejorable".

La investigación comenzó en Toledo, cuando unos policías localizaron al chico a altas horas de la madrugada caminando solo por la calle con una mochila al hombro, y al ser requerido por los agentes, les dijo que tenía intención de irse de su casa, ha informado hoy la Policía en un comunicado.

El menor fue entregado a sus progenitores, que posteriormente presentaron una denuncia en la que indicaron que su hijo estaba siendo víctima de acoso a través de internet por parte de un individuo mayor de edad, con el que mantenía contacto a través de una aplicación de mensajería instantánea para móviles desde hacía tiempo.

Las pesquisas condujeron a los investigadores hasta un hombre que residía en Vélez Málaga y que habría contactado con la víctima por primera vez a través de Whatsapp en noviembre de 2012.

Tras este primer contacto, la relación mediante esta aplicación se hizo diaria, y aunque en principio hablaban de temas cotidianos, poco a poco se fue interesando por su estado de ánimo, sus relaciones familiares y por las actividades que realizaba.

"De esta forma se fue ganando su confianza hasta llegar a solicitarle fotos sin ropa, y además le facilitó enlaces de páginas de internet con imágenes y vídeos de contenido sadomasoquista", añade el comunicado.

Los agentes lograron identificar al presunto autor de este acoso y efectivos de la comisaría de Vélez Málaga lo localizaron y detuvieron, al tiempo que encontraron en el registro de su domicilio material informático que acreditaba su actividad delictiva.

En la operación, denominada "Reina", han participado agentes de la comisaría de Vélez Málaga y de la Jefatura Superior de Policía de Castilla La Mancha.