­El pleno del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria dio ayer luz verde al convenio con la empresa pública Tragsa, dependiente del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

La firma de este convenio supone, según el alcalde de la localidad, Francisco Salado, «un paso más para que nuestro municipio cuente con una piscina cubierta y los demás equipamientos que tendrá la instalación deportiva».

El regidor explicó que ahora ese convenio será remitido para su firma al Ministerio y que una vez realizado este trámite, podrán comenzar las obras. «Tenemos previsto que los trabajos para la construcción de la piscina comiencen en un mes aproximadamente. Ahora hemos tomado un nuevo camino que va a permitir que Rincón de la Victoria haga realidad un proyecto tan demandado por los vecinos».

Salado manifestó que gracias al convenio con Tragsa y la retarifación que supone que una empresa haga la obra, los gastos del equipamiento se reducirán en un 12 por ciento, es decir, en algo más de 500.000 euros, por lo que la inversión de la obra será de 3,8 millones de euros en lugar de 4,3 millones de euros.

Además, el Ayuntamiento de Rincón podrá abonar la piscina en 36 mensualidades, independientemente de que la obra finalice antes de ese tiempo.

El alcalde recordó que este nuevo equipamiento contempla un centro deportivo compuesto por piscina cubierta polivalente de seis calles y 25 metros de longitud, piscina de enseñanza, gimnasio, spa, tres salas de deporte de interior y servicio de cafetería.

La parcela en la que se construirá el edificio tiene una extensión de 18.350 metros cuadrados, de los que 4.895 están reservados para la construcción de equipamiento cultural y otros 2.117 para bolsa de aparcamientos.

El alcalde negó que la financiación de esta obra suponga recorte alguno en las partidas de gastos sociales, como denunció el edil de IU, Pedro Fernández Ibar.