El Parador de Nerja acaba de alcanzar su primer medio siglo de vida. Fue inaugurado en julio de 1965 , apenas seis años después de que abriera al público la Cueva de Nerja, justo sobre el acantilado que delimita la playa de Burriana y el casco histórico de la localidad axárquica. Más de 150 personas, incluidas las principales autoridades locales, participaban hace apenas unos días en un acto que sirvió para recorrer a través de fotografías estas cinco décadas de turismo en el municipio más oriental de la provincia.

Emilio Mojón, el actual director del recinto, recuerda que la obra original fue ideada por el arquitecto Manzano Monís. «Sus maravillosas vistas, unidas al confort y cuidado de instalaciones, entre las que destaca el jardín, han hecho del Parador de Nerja destino elegido por multitud de clientes». En efecto, estas instalaciones han figurado en numerosas ocasiones entre las más prestigiosas de la red española de Paradores.

«Han sido cinco décadas en las que no hemos dejado de unir a personas. Tenemos a clientes que suman cuatro generaciones de visitantes fieles. Es un parador que no se olvida fácilmente. La ubicación es excepcional, con un microclima muy agradable, sobre el acantilado. Un ejemplo es que los trabajadores no suelen cambiarlo. Hay muchos que se jubilan en él. Y los directores siempre guardan muy buen recuerdo de Nerja», añade el propio director.

La plantilla al principio estaba integrada por unos 60 empleados, si bien es cierto que dicha cifra se eleva hoy a casi 80 -con la particularidad que en este caso existen muchos contratos a media jornada-. Entre los visitantes ilustres a lo largo de la historia, como atestiguan muchas imágenes del archivo, figuran muchos de los artistas que formaron parte de los festivales de la cavidad nerjeña. Por supuesto, en la lista también aparece Antonio Mercero, así como un Santiago Carrillo que llegó a pasar veranos enteros en el recinto.

Pero también fueron visitantes ilustres en la primera etapa tanto los entonces Príncipes de Asturias, Don Juan Carlos y Doña Sofía, así como el entonces ministro de Turismo, Manuel Fraga. «El rodaje de Verano Azul, como sigue siendo noticia y la serie sigue aún de moda, tantas décadas después, le confiere al Parador otra dimensión adicional, porque aquí se rodaron muchas escenas», argumenta el propio Emilio Mojón.

De hecho, el actor nerjeño Miguel Joven, Tito en la serie, mantiene activa una ruta guiada que entre los espacios que recorre incluye estas instalaciones con medio siglo de vida.

El más veterano de todos

El nerjeño Francisco Valverde es el trabajador con más años de antigüedad en la plantilla de este parador: 42 años fiel a estas instalaciones turísticas. Casi lo ha sido todo, porque comenzó aún adolescente como botones y desde los años ochenta ocupa el cargo de contable u oficial administrativo.

«Terminé el colegio y mis padres en ese momento no me permitían estudiar -relata-. Entré por Antonio Chicano, vecino y contable de aquel entonces. Yo todavía era un niño. Recuerdo que el Parador tenía apenas 40 habitaciones. Luego se construyó la tercera planta y hubo otra gran remodelación en 2001, hasta alcanzar las 98 habitaciones actuales», explica.

«Aquí se han alojado muchísimas personalidades, gracias a lo que ha representado el Festival de la Cueva», manifiesta Valverde.