El síndrome de Hunter o mucopolisacaridosis es una enfermedad neurodegenerativa infantil, transmitida hereditariamente por la progenitora del menor, según explica a este periódico el director Asociación Española de las Mucopolisacaridosis y Síndromes Relacionados, Jordi Cruz. Se trata de una enfermedad que no tiene cura «pero con el tratamiento de por vida sigue adelante, pero más lentamente», señala Cruz. Afecta a todos los órganos y va deteriorando la capacidad cerebral. A pesar de ello las esperanzas para José, que sufre el síndrome más agresivo, son altas. Sin embargo, no se puede obviar que se trata de una enfermedad con corta esperanza de vida. Insiste que sin tratamiento José podría llegar a los 15 años, una esperanza de vida que se alarga con los fármacos hasta la treintena, a no ser que los avances alcancen una cura antes de ese momento.