Sólo en el cultivo de subtropicales, la comarca de la Axarquía factura al año 100 millones de euros, lo mismo que todo el cine español -como se indicó en la pasada gala de los Premios Goya-. No es casual que preocupe y mucho la situación deficitaria de la red hídrica en la zona más oriental de la provincia. De hecho, después de quedar constituida, ayer se celebró una nueva reunión de trabajo del sector con la Junta como anfitriona.

Los directores generales de Planificación y Gestión del Dominio Público Hidráulico, Juan Serrato y de Infraestructuras y Explotación del Agua, Inmaculada Cuenca, celebraron un encuentro con representantes de las organizaciones agrarias, COAG, UPA y ASAJA, así como de diferentes comunidades de regantes. Ya habían mantenido encuentros en la capital malagueña tanto el 5 como el 22 de julio.

«Queremos seguir avanzando en las estrategias para mejorar la gestión y uso de agua en la Axarquía. De la información facilitada por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio se desprende que la comarca cuenta con suficientes recursos hídricos para atender los usos actuales, siendo necesario, por un lado que se adecuen las dotaciones de los cultivos a las necesidades reales y estrictas de las plantaciones, y por otro que se utilicen todos los recursos disponibles, tanto de aguas superficiales reguladas y fluyentes, como aguas subterráneas y regeneradas», señaló la administración autonómica en un comunicado.

Durante unas tres horas todas las partes se mostraron «conformes con la idea central de que el sector requiere un mayor nivel de organización», con la constitución de las comunidades de regantes que aún no están formalizadas, y con la creación de una Junta Central en la que se incorporen todos los usuarios -como continúa la Junta-, de forma que puedan tener una mayor participación en las decisiones adoptadas, a la par que una mayor responsabilidad en la gestión.

De forma paralela, el pleno del Ayuntamiento de Vélez aprobó en su sesión de ayer «instar a las administraciones en la adopción de actuaciones hídricas para paliar los efectos de la sequía».