Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer a un hombre de 35 años como presunto autor de la muerte de su propia madre, conocida como Pepa entre el vecindario del Conjunto Colonia del Puerto VII, calle en la que residían. El hijo de la víctima fue el que por sus propios medios se personó en la Comisaría de Policía para dar cuenta de los hechos. De momento se desconocen los motivos que condujeron al suceso, porque incluso entre los vecinos se indicó que no se conocían «ni peleas ni altercados» entre la madre y el hijo.

En la vivienda donde convivían ambos ya no residía el padre del supuesto autor de la muerte de Pepa. La pareja llevaba meses separada y él habría fijado su residencia en el domicilio de su madre. No obstante, solía acudir casi a diario a la casa para ver el estado de su hijo y fue en estas circunstancias como se encontró a su exmujer ya fallecida. De inmediato dio la voz de alarma, aunque para entonces, pasadas las ocho y media de la mañana, ya casi se había procedido al arresto de su hijo, como indicaron fuentes de la investigación a este periódico.

Algunos de los vecinos de la urbanización, compuesta de viviendas oficiales y con calles próximas a la antigua CN-340, aunque bastante tranquilas, comentaron que últimamente, víctima y agresor sí que mantenían una relación muy tensa por problemas de dinero.

«Al parecer, el hijo se ganaba la vida con la pesca de forma puntual y había tenido problemas de dinero», indicó uno de allegados de la familia. La víctima era una persona «bastante trabajadora», de unos 60 años y muy activa, sin ningún problema con el vecindario. Además, era muy conocida por ser una familia con una larga presencia en la Caleta, donde su familia tiene negocios importantes, como la Panadería Ramos.

«El muchacho siempre se ha portado muy bien, era muy correcto y nunca habíamos escuchado ninguna pelea ni visto nada que nos llevara a pensar que podía ocurrir una cosa así», matizó una vecina de la urbanización, que vio pasar al detenido la noche anterior frente a su casa y lo saludó «sobre la una de la madrugada». Otros vecinos detallaron que el hombre supuestamente tenía «problemas con las drogas desde hacía algún tiempo y han apuntado a esta causa como posible motivo del suceso».

La noticia también ha conmocionado el día a día en la localidad turística de Torrox Costa, donde el exmarido de la fallecida, de origen italiano, regenta un supermercado. Pese a la separación, la pareja había seguido hasta hace escasas fechas trabajando en las mismas instalaciones torroxeñas. Ayer, de hecho, el establecimiento vinculado al sector de la alimentación y muy frecuentado en estos días, permaneció cerrado al público para sorpresa de muchos de los clientes.