Más de 400 vecinos de Alfarnate recrearán este viernes 'La Embajada', en la que se transforma el pueblo y se produce el rapto de su patrona y su posterior rescate.

Esta recreación del rapto de la Virgen de Monsalud data de 1934, aunque fue suspendida años después como consecuencia de la Guerra Civil, y recuperada en la década de los 70 por un grupo de alfarnateños encabezada por el abogado Victoriano Frías.

"El texto de La Embajada parece tener sus orígenes, por el vocabulario utilizado, en el siglo XVIII. Es una transcripción literal de la obra 'Las relaciones' del archivero Francisco Bejarano Robles publicada en 1919. En esta obra hace referencia a tres pueblos: Benadalid, Benamocarra y Alfarnate, haciendo más hincapié en el caso de nuestro pueblo", ha comentado Salvador Urdiales, alcalde del municipio.

Asimismo, el regidor ha destacado "la belleza y antigüedad del texto cuyo autor es anónimo". "Está declarada Fiesta de Singularidad turística provincial pero estamos trabajando en conseguir más datos para poder ir más allá", ha anunciado.

La representación es gratuita y al aire libre en la llamada Haza de la Virgen aunque a las 12.00 horas tiene lugar la tradicional salva de trabucos dando comienzo a esta fiesta en la que sus habitantes se dividen en dos bandos interpretando el secuestro de la Virgen por las calles del pueblo.

La recreación es a las 18 horas y tiene una duración de entre 40 y 45 minutos. El programa de actividades que tendrán lugar en honor a la patrona que culminará el martes con la misa en su honor y la procesión por las calles del pueblo a las 21.30 horas. El domingo será cuando la Virgen se traslade a la iglesia de Santa Ana. Aborda diversos contenidos que van desde los deportivos, a los culturales pasando por los juegos tradicionales, la gastronomía o la música; entre ellos, los concursos de 'Productos del Huerto' en el que se premian los de mayor calidad y tamaño y el 'Tiro con honda'. También hay competiciones de atletismo y una vuelta ciclista, como talleres de alfarería, caligrafía árabe, henna o cetrería, y música en directo todas las noches.