La mayoría de los agentes sociales de Rincón de la Victoria lamenta la pérdida de la condición del municipio axárquico más occidental como «zona de gran afluencia turística». A efectos comerciales, esta declaración concede la libertad horaria a los establecimientos de menor superficie, de manera que logra protegerlos, en teoría, de las medianas y grandes superficies. En este sentido, el colectivo rinconero que agrupa a los empresarios incluso solicita a la Junta que revise los techos que determinan tal declaración, al entender que no se ajustan a la realidad actual de multitud de municipios.

De hecho, el término rinconero ha cumplido los requisitos exigidos entre 2013 y 2017, de manera que ha conservado durante dicho periodo tal declaración. La provincia malagueña es la que posee más zonas de gran afluencia turística en Andalucía, porque de los 25 municipios declarados ocho se localizan en la provincia: Benalmádena, Estepona, Fuengirola, Málaga capital, Manilva, Marbella, Nerja y Torremolinos.

El caso de Rincón de la Victoria genera una pérdida forzosa, pero en su día el Ayuntamiento de Torrox forzó en sesión plenaria a renunciar a tal declaración, porque el pequeño comercio entendía que la liberación horaria lo obligaría a tener que abrir en determinadas fechas y con el consiguiente gasto en personal que no estaba dispuesto a asumir.

Según el empresario rinconero José Antonio Villodres, que preside la asociación local ACERV, la pérdida de esta declaración perjudica en especial a hoteles y campos de golf, «pero también al resto de ciudadanos, porque la apertura en los días festivos permitía cierto movimiento de personas que activaba a todo el comercio en general».

Relata que es cierto que su municipio apenas tiene dos hoteles de gran tamaño y un tercero de menor capacidad. Pero con 44.000 habitantes, como agrega, lo normal es que la Junta revise un decreto que en su día fijaba unos techos «diferentes a una realidad actual que a nadie le hace dudar sobre la condición de Rincón de la Victoria como municipio de gran afluencia turística», manifiesta.

«Que no cumplamos en términos de número de pernoctaciones no quita que tengamos un volumen de turistas muy significativo. Nos merecemos la protección para el pequeño comercio en el sentido de liberar los horarios en establecimientos de menos de 300 metros, aunque no lleguemos a cumplir los requisitos exigidos», concluye.

La Consejería de Turismo y Comercio de la Junta de Andalucía de momento no ha barajado la posibilidad de cambiar las reglas que fijan esa condición de Zona de Gran Afluencia Turística a efectos de horarios comerciales. En su día alegó que se determinan con una serie de «criterios estadísticos concretos».