La Secretaría General de Pesca dependiente del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente se ha comprometido a elaborar un nuevo borrador que recoja las alegaciones de los pescadores del Mediterráneo andaluz, incluidas las aportadas por el colectivo de 250 embarcaciones malagueñas dedicadas a este sector, pero recuerda que las medidas sobre el agotamiento de los caladeros son impuestas por la Unión Europea.

De esta forma, los portavoces de las cofradías de pescadores de la provincia se muestran pesimistas tras el encuentro celebrado ayer en Madrid, en la propia sede ministerial. El nuevo marco comunitario impondría, aunque el Gobierno central busque ahora mejoras en las medidas, sacrificar una cuota anual para los pescadores, a razón de una reducción del 10% en los días hábiles para faenar.

Los portavoces del sector consideran que, en esa situación, «en dos años muchas de las embarcaciones se verían obligadas a suspender su actividad por la falta de rentabilidad». Así lo volvió a confirmar ayer el presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de la provincia, Miguel Ángel Carmona.

«Es muy importante, como ya anticipamos en este periódico, que la sociedad sea consciente de lo mucho que durante la negociación habrá en juego», alegó. Volvió a recordar que Málaga y el resto de la provincia tienen entre sus pilares turísticos los típicos productos procedentes del esfuerzo de los empresarios de pesca de la Costa del Sol. «Miles de visitantes sueñan con disfrutar de nuestra meteorología, pero también con degustar el mejor pescado que pueden encontrar en el Sur de Europa», subrayan los representantes de la flota malagueña.

Con la agenda mostrada ayer por responsables ministeriales al colectivo, dichos portavoces esperarán a tener en sus manos ese nuevo borrador para replantearse o no un calendario de movilizaciones que pueda evitar «la catástrofe que de momento ya nos anuncian. Esperemos que el Ministerio anteponga esta vez los intereses generales y defienda a la ya mermada flota malagueña», finalizan.