El gobierno de la ciudad norteña de Ilan decretó la paralización de la actividad laboral, debido a la fuerza de los vientos y las fuertes lluvias que acompañan a Kalmaegi.

La actividad pesquera y marítima en las cercanías de Taiwán también ha cesado y el Servicio Meteorológico ha pedido a los taiwaneses que no se acerquen a las costas y tomen precauciones ante posibles inundaciones y corrimientos de tierras.

Si Kalmaegi, con vientos de 108 a 137 kilómetros por hora en un radio de 120 kilómetros, sigue su trayectoria actual azotará gran parte del norte de Taiwán, según alertó el Servicio Meteorológico Central de la isla.