Accedió a la alcaldía en 2008 después de que se desencadenara la operación Astapa en el municipio. Desde entonces gobierna un ayuntamiento prácticamente en bancarrota. Asegura que no tiene ayuda de casi nadie y ha echado en falta el apoyo del PP, el principal partido en la oposición. Sin embargo, no tira la toalla y asegura que seguirá luchando hasta el final. La política le apasiona y forma parte de su vida.

¿Qué balance hace de la gestión en su etapa como alcalde?

Sin duda se trata de una gestión extraordinariamente complicada y, al mismo tiempo, fructífera. De manera muy genérica diré que los aspectos negativos han venido marcados por la situación de crisis generalizada y el hecho de que Estepona, como otros muchos municipios, ha venido sustentando su economía fundamentalmente en un sector que se ha visto muy seriamente perjudicado, como es el de la construcción. En segundo lugar, hemos de sumar la losa muy pesada que soporta este Ayuntamiento en modo de deudas y, por último, la complejísima composición de la corporación y una oposición totalmente destructiva, dañina y perjudicial. Pese a todo ello, este ayuntamiento está cumpliendo los acuerdos alcanzados con la Tesorería General de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria, algo que nunca antes había ocurrido, lo que nos ha permitido beneficiarnos de la mayor inversión pública de toda la historia gracias a los Fondos Estatales de Inversión Local y al plan Proteja de la Junta. Hemos resuelto el Plan Especial del Casco Histórico, paralizado durante seis años, estamos adaptando nuestro PGOU a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía, se está remodelando íntegramente el puerto pesquero y estamos construyendo centros educativos nuevos, entre otros proyectos.

Accedió a la alcaldía en un momento muy difícil y convulso. ¿Se ha sentido arropado por sus compañeros, ciudadanos y empresarios de la localidad o bien, algunos le han decepcionado?

Mire, como alcalde cobro 2.023 euros al mes. Soy el alcalde que menos cobra de los ayuntamientos de más de 50.000 habitantes de toda Andalucía. Estoy soportando una presión y una campaña de acoso y derribo totalmente conocida, es pública y notoria, porque a mí algunos jamás me van a perdonar haber acabado con sus ingresos más que millonarios. Las zancadillas, jugarretas y políticas barriobajeras que están practicando algunos en Estepona no tienen parangón. ¿Acaso es normal que el PP haya estado mandando correos electrónicos y mensajes de móviles a sus simpatizantes para boicotear la inauguración de la Feria y Fiestas de Estepona alegando algo totalmente falso como que he firmado un decreto para suprimir la bonificación al empadronamiento del IBI? Si sigo aquí, con convicción y con determinación es, única y exclusivamente, por el respaldo, cariño y comprensión que me demuestran a diario muchísimos ciudadanos anónimos que son los que me preocupan, los que me ocupan y, al mismo tiempo, me inquietan.

Algunos le han tildado de chivato tras denunciar las irregularidades en el caso Astapa, ¿qué opina de esas críticas?

Pues no le diré nada, sencillamente. El que entienda que la obligación de un político, o de un ciudadano responsable, es mirar para otro lado cuando sospecha que se están cometiendo irregularidades que están perjudicando de manera muy seria a su ciudad, es que no tiene ni cabeza ni coraje. Hice lo que debí y, pese a tener que ir con escolta (posiblemente durante el resto de mi vida), no me arrepiento.

¿La situación económica del Ayuntamiento está mejorando? ¿Qué recortes ha hecho?

En menos de dos años el Ayuntamiento ha reducido la plantilla municipal en unos 150 trabajadores y sin la adopción de medidas traumáticas. Hemos aplicado el sentido común y estamos racionalizando los recursos con los que contamos: no se ha hecho un solo contrato, no se ha prorrogado ni un solo contrato temporal, hemos establecido un plan de prejubilaciones y jubilaciones, hemos suprimido horas extras, gratificaciones, complementos y pluses. Hemos suprimido todos los gastos de protocolo, hemos establecido un plan de optimización energética, se han suprimido la mitad de las líneas telefónicas… Más de lo que se está haciendo es imposible. Le daré otro dato: durante 2007 y 2008 el Ayuntamiento gastó en la organización de la Feria más de 550 mil euros, durante 2009 redujimos a menos de 300 mil, y este año se ha quedado en menos de 100 mil.

¿Los trabajadores cobrarán sus nóminas hasta el final de la legislatura? ¿Cómo va a conseguir el dinero?

Por supuesto. Eso es lo que quisieran los concejales del PP, que no cobrasen los trabajadores del Ayuntamiento. Pues evidentemente con todos los recursos legales con los que cuenta esta y cualquier otra administración pública en España.