El portavoz del PSOE de Fuengirola y candidato a la Alcaldía en las próximas elecciones, Javier García León, ha hecho pública esta mañana una providencia del Juzgado de Instrucción número 4 de Fuengirola en la que se imputa al director de la televisión municipal FTV, José Manuel Díaz Rincón, por presuntos delitos de prevaricación y tráfico de influencia. El supuesto de prevaricación se sustenta en la incompatibilidad que establece la Ley para contratar con el Ayuntamiento. El de tráfico de influencias, se sustenta en que Díaz Rincón habría aprovechado su relación sentimental con la alcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña, para obtener estos contratos con su productora particular.

García León ha expuesto minuciosamente los hechos, que arrancan en mayo de 2001, cuando Díaz Rincón es nombrado director de Fuengirola Televisión. En aquel momento, era ya socio único y administrador único de la mercantil denominada Gap Producciones Cine Vídeo Televisión y Publicidad, situación que se da desde su inscripción el 11 de febrero de 1999 hasta al menos el año 2004. Dicha mercantil tenía como objeto social la producción y realización de todo tipo de trabajos en formato digital cinematográfico y video, la gestión de publicidad y agencia y corresponsalía de noticias y su sede social estaba radicada en el núcleo de Benagalbón, Rincón de la Victoria.

En el texto jurídico, se acredita que el Ayuntamiento de Fuengirola contrató servicios con esta productora durante los años 2002 y 2003, por importes de 10.057 € y 97.238 € respectivamente, contraviniendo y vulnerando la legalidad. Esto, siempre según el citado texto, se realizó con un "patente, flagrante y continuo desbordamiento de la misma, y más concretamente de lo establecido en el artículo 2.1.c de la Ley 53/1984, de 26 de diciembre, de Incompatibilidades del Personal de al Servicio de las Administraciones Públicas.

"Evidentemente no nos interesa lo más mínimo la vida sentimental de la señora Oña, pero, en este caso, el asunto tiene una clara implicación jurídica. De hecho, la propia alcaldesa admitió ante el TSJ esa "amistad más íntima" con Díaz Rincón", ha subrayado García León, quien ha agregado que, cuando el directivo inició su relación con Oña todavía mantenía otra relación sentimental y creó una sociedad a nombre de su otra pareja al objeto de camuflar sus contrataciones. La nueva sociedad se denominó Comunicación Integral Andaluza (CIA), a cuyo frente Díaz Rincón situó a su pareja hasta entonces, M. G. C. "Con esta nueva sociedad, con idéntico domicilio social que la primera, con una socia única y administradora que es al mismo tiempo pareja de hecho del Sr. Díaz Rincón, el Excmo. Ayuntamiento de Fuengirola continúa teniendo relaciones contractuales prolijas", relata el citado texto jurídico.

"El descaro no tenía límites"

"Se da la circunstancia de que Díaz Rincón llegó a contratar hasta con la propia FTV siendo director de la misma, el descaro no tenía límites. Sólo en un año CIA facturó más de 100.000 € (2003) y entre GAP y CIA, ambas de Díaz Rincón, más de 200.000 €", ha señalado el portavoz socialista.

"Podríamos estar ante un delito continuado de prevaricación y tráfico de influencias, que están castigados con prisión de hasta 2 años y multa del duplo de lo obtenido. En aplicación del Código Penal, por lo tanto, los socialistas pediríamos en un juicio la devolución del doble de lo facturado ilegalmente, pediríamos al juzgado que ese dinero vuelva a las arcas municipales tan dañadas por los desmanes de Esperanza Oña", ha avanzado.

García León ha criticado el modo de proceder político de Oña y su permanente confusión de lo público y lo privado. "Es evidente que señora Oña tiene gran afición por buscar acomodo laboral a su entorno, desde su novio a su propio hijo. Eso sí, siempre con buenos trabajos", ha ironizado.