Arranca el juicio contra la Protectora de Animales Parque Animal de Torremolinos, en el que se acusa a la presidenta, Carmen Marín; el encargado, el veterinario titular y el antiguo veterinario de un presunto delito de maltrato continuado a los animales, falsedad documental, estafa, apropiación indebida, intrusismo profesional y denuncia falsa. Así, es la primera vez en España que se abre un procedimiento penal contra una asociación protectora de animales. Carmen Marín, que tenía que declarar como imputada, no apareció por el Juzgado número 5 de Torremolinos, alegando enfermedad a través de un escrito. «Estoy muy enferma y apenas me puedo mover. Tengo un virus que me estoy tratando con antibióticos», aseguró a este rotativo, mostrando su desconocimiento sobre cuándo volverá a ser llamada para declarar.

Los que sí prestaron declaración fueron los tres agentes de la Guardia Civil que realizaron la investigación llevada a cabo a finales de 2010. En el informe de uno de ellos, al que La Opinión de Málaga ha tenido acceso, se detalla «el número de envases de producto eutanásico dolethal y T-61 adquirido por Parque Animal en los últimos cinco años (desde 12 de julio de 2005 hasta el 12 de agosto de 2010). Según un informe del Colegio Oficial de Veterinarios de Málaga, «con esa cantidad, utilizando la dosis recomendada, se podrían sacrificar 2.865 perros y gatos en un período de cinco años». Sin embargo, Parque Animal está acusada de sacrificar 2.183 animales en tan sólo veinte meses.

Así, según El Refugio, una organización sin ánimo de lucro cuyas actividades principales son la prevención y denuncia del abandono y maltrato de los animales y que se presenta como acusación en este juicio, se han sacrificado un 250% más de animales de lo establecido por la ley, y «Carmen Marín utilizó menos cantidad de producto eutanásico, ocasionando la muerte masiva de animales de forma agónica». Estos sacrificios se hacían en lo que han denominado «días de exterminio».

Según el abogado de El Refugio, el atestado del Seprona ratificado por los agentes en el juzgado dice que en Parque Animal «se recogen cientos de perros y gatos, anualmente, de la provincia de Málaga». «Supuestamente muchos de los animales recogidos son sacrificados por la propia presidenta de la protectora, quien carece de titulación veterinaria y, además, presuntamente utiliza una dosis mínima del medicamento para llevar a cabo tales sacrificios con el fin de ahorrar costes, ocasionando a los perros y gatos una muerte lenta y agónica que en muchas ocasiones puede durar varios minutos. Supuestamente, los perros y gatos sacrificados son guardados en los congeladores de la protectora cuando aún se encuentran vivos. Y la compra de los productos eutanásicos del año 2010 no ha sido prescritas por facultativo alguno», según reprodujo el abogado de la acusación popular.

El Refugio pide que se castigue a la presidenta

Al mismo tiempo que se celebraba el juicio en Torremolinos, varios componentes de El Refugio ofrecían una rueda de prensa en Málaga capital para informar sobre el proceso judicial, acompañados de imágenes de una veintena de perros y gatos «sacrificados en Parque Animal». Los componentes de El Refugio mostraron a algunos de los animales que «pudieron salvarse del sacrificio». «Vamos a poner todos los medios legales para que la presidenta sea castigada penal, civil y administrativamente», aseguró el presidente, Nacho Paunero.