El consejero andaluz de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, mostró ayer su discrepancia por los datos aportados por Comisiones Obreras sobre el cierre de hoteles en invierno, según los cuales se ha reducido el 40% de plazas hoteleras en la Costa del Sol, cinco puntos más que el año anterior.

Alonso afirmó que los datos de los que dispone no apuntan ese volumen de cierre y que son inferiores, al mismo tiempo que añadió que el turismo está resistiendo y las cifras de 2011 «generan esperanza».

Según el consejero, el turismo es uno de los pocos sectores productivos que están generando riqueza y espera que cree empleo. Aunque aseguró que la oferta turística pierde valor cuando se cierran hoteles, considera que estos establecimientos en Málaga obtuvieron en líneas generales buenos resultados en 2011.

Por otra parte, destacó la intensidad de la presencia de Andalucía en la Feria Internacional del Turismo (Fitur), a pesar de la limitación presupuestaria, y afirmó que en la próxima feria IBT de Berlín intensificarán la acción hacia el turismo alemán, que «no ha estado a la altura de lo que hubiéramos deseado todos».

Por el contrario, aseguró que se produjo «una extraordinaria recuperación de otros destinos a nivel internacional» y espera que en el próximo año los datos turísticos de Andalucía, Málaga y la Costa del Sol evolucionen de forma positiva «para alcanzar las expectativas de un crecimiento del 2 por ciento».

Luciano Alonso se refería con estas palabras a la crítica lanzada por CCOO en torno a la gestión hotelera en la Costa del Sol. La Costa del Sol es un destino donde la mayoría de los hoteles son de apertura permanente durante todo el año; una tendencia que se está truncando en los últimos años, según indicaron los secretarios generales de Comercio, Hostelería y Turismo de CCOO de Andalucía y Málaga, Gonzalo Fuentes y Lola Villalba, respectivamente, quienes informaron en rueda de prensa de la situación turística de la región.