La costa de San Pedro Alcántara no se quedará fuera de estudio. El Ministerio de Medio Ambiente retomará el proyecto de estabilización de las playas de este núcleo marbellí y empezará por estudiar la posibilidad de construir espigones o diques sumergidos. El objetivo es evitar las continuas pérdidas de arena producida por los temporales.

El secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos de Armas, se comprometió ayer a hacerlo tras mantener una reunión con la alcaldesa, Ángeles Muñoz, según informó el Ayuntamiento. El informe resultante del estudio «nos permitirá tener una solución definitiva en nuestras playas en el menor plazo posible», indicó ayer la regidora.

Medio Ambiente analiza en la actualidad las playas marbellíes, desde La Bajadilla a Nagüelles, por un presupuesto de 205.679 euros. La sociedad limitada Infraestructura y Ecología se encarga de esta tarea desde el 23 de septiembre de 2010, fecha en le fue adjudicada. Pero el estudio de las playas situadas entre los ríos Guadalmina y Guadaiza, en San Pedro, quedó proyectado con una inversión de 185.354 euros pero nunca fue adjudicado.

«El anterior gobierno, del Partido Socialista, nos prestó muy poco apoyo en proyectos estratégicos del municipio», criticó la alcaldesa.

La solución a las pérdidas. Para el gobierno municipal del PP, la construcción de espigones, diques o cualquier otro elemento arquitectónico en las playas impediría que la arena se perdiera cada vez que la ciudad padece un temporal de lluvia y viento. Marbella pierde alrededor de 200.000 metros cúbicos de arena al año por esta causa.

La construcción de espigones, de ejecutarse, tardaría al menos seis años, de acuerdo con los técnicos consultados por este diario. Los ecologistas, por su parte, no están de acuerdo en que los diques resuelvan el problema de regeneración de arena que padece la costa marbellí y que, según consideran, se debe a la presión urbanística.

La ciudad, año tras año, mantiene sus playas gracias a los aportes de arena que recibe a través de la oficina de Demarcación de Costas, dependiente del Ministerio. Alrededor de 30.000 metros cúbicos que distribuye entre 27 kilómetros.

Muñoz aprovechó ayer su encuentro con el secretario de Estado para el Medio Ambiente en Madrid para solicitar mayor agilidad en la recuperación de las Dunas de Artola. La protección y embellecimiento de este monumento natural depende de la expropiación de tres fincas privadas sobre las que se extiende este paraje. El Ayuntamiento se ocupará de expropiar y Medio Ambiente de aportar su coste.