Pocos son en nuestra provincia los que no saben que hay un hipódromo en Mijas. Al menos, ayer, a tenor de la afluencia de público, pareciera que estaban acudiendo a una cita obligada en sus respectivos calendarios: nada menos de 6.400 asistentes, según el Ayuntamiento mijeño. El hipódromo Costa del Sol acogió ayer su carrera por excelencia, la Mijas Cup, con la presencia de centenares de aficionados y curiosos de este deporte que pasaron una gran jornada de carreras con las bonanzas del bueno tiempo que suele ser habitual en esta parte del globo. No en vano, este deporte, de gran tradición -y casi exclusivo- de las islas británicas, va asociado a las irregulares condiciones climatológicas de su país de origen y, en el caso de ayer, bien podía verse a muchos espectadores en manga corta. Todos iban a ver las carreras, pero también, de paso, a disfrutar de las muchas y buenas posibilidades de ocio y restauración que ofrece esta instalación deportiva de la que el Ayuntamiento de Mijas es la principal propietaria.

«Quien viene al hipódromo no sólo puede vibrar con hasta cinco carreras de caballos en una jornada. Puede comer aquí en una docena de restaurantes al alcance de cualquier bolsillo; los niños pueden quedarse en una guardería; y, además especialmente para aquellos que vengan de otros lugares, pueden ver de actuaciones tradicionales de nuestra tierra. En definitiva, una oferta deportiva y de ocio sin igual en la Costa del Sol», explica el director y creador del recinto equino, Antonio Maldonado.

Así pues, el dirigente estaba satisfecho, ayer, con la acogida de esta última carrera de la temporada de Invierno al ver las terrazas de los bares del hipódromo absolutamente llenas así como todos los puestos de las tradicionales apuestas hípicas que no daban a basto con tanto participante.

Pareja, trío, ganador... Es el caso de William McKenzey, un recién jubilado escocés que ha decidido venirse a la Costa a pasar una temporada y ha descubierto el hipódromo. Las carreras de caballos, y sobre todo, las apuestas.

«Estoy muy contento porque al venir a España pensaba que no iba a poder desarrollar mi hobby. Un amigo me habló del hipódromo de Mijas y he venido, expresamente a ver las carreras», afirma mientras retira su boleto.

Pilar Manzano, sin embargo, vive en Mijas desde que nació y asegura haber venido un par de veces. «Más había visto tanta gente y tanta expectación. Se ve que es una carrera importante, aunque yo vengo por mis hijos, que les encanta venir aquí», espeta.

De hecho, la Mijas Cup no sólo es la carrera más importante del año en el recinto mijeño, sino que también es la más señalada del calendario hípico nacional.

«Entre otras cosas, porque es la que más premios reparte: 73.100 euros, pero además, porque vienen algunos de los caballos más importantes del panorama internacional», apunta Maldonado.

De hecho, a la carrera de ayer acudieron cuadras de Marruecos, Gran Bretaña, Francia, Alemania, Estados Unidos y, como no, España. En el caso de los norteamericanos, la importancia del premio hizo que los propietarios del caballo que compitió en la arena mijeña ayer se desplazasen in situ a comprobar la suerte de su ejemplar en la tarde de ayer.

Finalmente, el ejemplar Pacific de la cuadra teutona, se llevó el gato al agua desbancando a los favoritos Entrecopas y Nelson Groom. Su cuadra se llevará 43.100 euros demostrando que el favorito, en muchas ocasiones, sólo es un supuesto.