Charlie, un nervioso Yorkshire Terrier de Fuengirola, vuelve a casa y se va directo a su recipiente de agua, que en seguida, vacía con gran voracidad. Ha sido un paseo distinto. Ha estado en el recién inaugurado parque canino «Guau guau» de la localidad costasoleña y se lo ha pasado en grande.

Él y una decena de estos animales del municipio y de toda la provincia han pasado por esta nueva instalación, promovida por el Ayuntamiento de Fuengirola, desde que el pasado viernes fuese abierto al público. Se trata de un recinto ajardinado ubicado en la calle Alcalá Galiano, en el barrio de Los Pacos, y que cuenta con 5.400 metros cuadrados.

En ellos, los canes pueden ejercitarse con el área de entrenamiento, con instrumentos homologados, la zona de desarrollo muscular o, incluso, hacer sus necesidades en los dos pipi-can instalados en el recinto. El mismo está completamente vallado para que los perros puedan estar controlados.

Dándose una vuelta por el parque, se ve que la iniciativa municipal ha gustado. Sobre todo, como no, a los dueños de los canes, que disfrutan al ver a sus amigos brincar y correr entre las muchas atracciones que ofrece la instalación canina.

«Le encanta. Llevamos dos días viviendo y pienso que, si por él fuera, se quedaría aquí todo el día», dice Estefanía, la dueña de Charlie.

Carolina y Chanel traen a sus ejemplares, un Pitbull y un Pastor Alemán, a visitar el parque y coinciden las dos en señalar que es un acierto crear espacios urbanos específicos para perros.

«Está lejos de mi casa, pero ya se sabe, no se puede poner en la puerta de casa. Merece la pena venir porque ellos se lo pasan genial», asegura.

Entre los que estuvieron en el recinto estaba Enrique Xifré, un adiestrador de canes profesional, que interesado por las noticias sobre el mismo, acudió a ver qué tal estaba. «No conocía uno igual en España. Técnicamente, está bastante bien. Teniendo en cuenta que casi no existen, está claro que es un avance para el mundo canino», concluye.