La antigua edil de UCB y recién destituida de sus delegaciones en el Ayuntamiento de Benalmádena, Encarnación Cortes, se personó a primera hora de ayer en el puerto deportivo de Benalmádena acompañada de una pareja de policías locales para exigir que se le mostrara toda la documentación relacionada con la gestión del consejero delegado, Francisco Salido, durante este año de legislatura. Como respaldo llevaba una autorización firmada por el alcalde y presidente del Consejo de Administración del puerto, Javier Carnero.

No obstante, según denunció, se le denegó el acceso a dicha documentación, aunque el secretario del consejo, José Manuel López Merino, aseguró más tarde que «es razonable que no se puede entregar documentación en un día» y a través de un escrito que registró en el Ayuntamiento se comprometió «a facilitarla de forma inmediata». Algo de lo que duda Carnero.

La decisión de Cortés de pedir esta documentación viene propiciada después de que en marzo de este año «terceras personas» le alertaran de posibles irregularidades en la gestión del puerto, hecho del que informó a la Fiscalía Anticorrupción de Málaga y que pidió que investigaran.

«Me han dicho que el consejero será quien me tenga que decir cuándo puedo venir y qué documentación puedo ver», explicó, a la vez que apoyó la denuncia del alcalde asegurando que a sus oídos también ha llegado que «el lunes pasado sacaron cajas con documentos y se llevaron información de los ordenadores».