Una nueva colaboración entre la policía española y francesa ha culminado con la detención de un fugitivo buscado desde hace casi tres años por las autoridades judiciales galas por unos presuntos delitos de naturaleza sexual. En esta ocasión, la Policía Nacional de Málaga ha conseguido localizar y detener en la Costa del Sol a un hombre de 67 años de edad que está acusado de violar y agredir sexualmente a su nieta menor de edad durante varios años.

Según informó ayer la Comisaría Provincial de Málaga a través de un comunicado, la detención de este prófugo, natural de Casablanca (Marruecos), surge a raíz de una orden europea de detención y entrega emitida por las autoridades judiciales francesas por la violación y agresión sexual de la pequeña.

Según los datos aportados por el Ministerio del Interior, el punto de partida de la investigación situaba al fugitivo en el municipio de Torrevieja, en la provincia de Alicante, lugar adonde supuestamente habría huido en el año 2010 procedente de Francia. Sin embargo, fuentes policiales aseguraron a este periódico que los investigadores del Grupo de Localización de Fugitivos del Cuerpo Nacional de Policía recibieron una información que situaba en las últimas semanas al fugitivo en un municipio de la Costa del Sol.

Las pesquisas permitieron cerrar el cerco al fugitivo hasta el punto de limitar su búsqueda al municipio de Mijas, donde los diferentes dispositivos de vigilancia y seguimiento dieron sus frutos. Así, hace unos días, los agentes lo abordaron en las inmediaciones de la vivienda en la que se había instalado y lo detuvieron por los hechos delictivos por los que está acusado en Francia.

Las fuentes aseguran que éstos se remontan al período comprendido entre 2001 y 2005, años en los que presuntamente habría cometido varios delitos de agresión sexual y violación sobre su nieta, concretamente desde que la menor tenía siete años y hasta que cumplió los once.

Sin embargo, los hechos salieron a la luz enero del año pasado, cuando su nieta, ya mayor de edad, denunció los hechos ante la policía francesa y desencadenó la huida de su abuelo, que se ha mantenido en paradero desconocido hasta la actualidad.

Según confirmaron ayer fuentes oficiales de la policía, el hombre ya ha pasado a disposición del Juzgado Central de Instrucción de la Audiencia Nacional, cuya autoridad tramitará su extradición al país vecino para que sea juzgado por los hechos denunciados.