­­­Los comerciantes de Torremolinos tienen nuevo presidente, Juan Vallejo que reivindica una mejora en la salud comercial de la ciudad y una mayor actividad para atraer a los viandantes a las calles, sobre todo con la petonalización del centro. Un Torremolinos en el que cada vez son mas los comercios que echan el cierre, aunque ahora se encuentran en medio de un plan de revitalización del Centro Urbano como objetivo final.

¿Qué retos se plantea la directiva de la ACET en esta nueva etapa?

Hemos cambiado ocho miembros de los doce. Contamos con empresarios de todo tipo de comercios y todas las áreas urbanas de Torremolinos están representadas en la junta. Es necesario que apostemos por la innovación y la potenciación del comercio local. Ahora estamos trabajando para que los comercios asociados puedan vender a través de un buscador propio de nuestra web y así facilitarles el salto a lo digital.

¿Cómo de necesaria es la reactivación del comercio en Torremolinos?

Es muy necesaria. Tenemos que recuperar los nichos de mercado perdido. Sobre todo hay que saber valorar qué tipo de artículos son los que demandan los ciudadanos para saber qué les tenemos que ofrecer.

¿Cuáles son esos artículos o negocios que requieren los ciudadanos de Torremolinos?

Al tratarse de una zona de mucho turismo es necesario apostar por artículos de regalo, incluso tenemos que recuperar las tiendas por las que Torremolinos ha sido conocido como pueden ser las de calzado, ropa y peletería.

El Ayuntamiento está peatonalizando el Centro, ¿cómo está afectando a los comercios de la zona?

Por el momento lo tenemos que valorar de una manera positiva. Y es que es algo que venimos reclamando desde el año 2000 en el que editamos varios informes e incluso un libro en el que se explicaban los motivos. No es normal que los coches pasen por una de las zonas con más comercio de una ciudad. Pero para que funcione hay que hacer que los ciudadanos vayan allí.

¿Considera acertadas las medidas que se están realizando para atraer al público?

Se tienen que hacer más cosas. Es positivo realizar el mercadillo de Navidad o la exposición de Elena Laverón, pero todavía es insuficiente para ver resultados. Las grandes marcas sólo vendrán si en sus estudios ven que hay gente en la zona. Nosotros proponemos la instalación de una pantalla gigante para proyectar películas o eventos deportivos, también creemos que se podría expropiar la casa de María Barrabino como atracción cultural y que sirva de puerta de entrada a la plaza Costa del Sol. Todavía falta mucho para la revitalización total.

Hace más de seis meses entró un nuevo gobierno municipal, ¿cómo está Torremolinos desde entonces?

Todavía es pronto para hacer una valoración. Hay que esperar. Para los comerciantes puede ser positivo si consigue esa vitalización que pedimos.

Y los años de Fernández Montes, ¿cómo fueron para sus asociados?

Como todo en la vida, fueron unos años en los que hubo luces y sombras. Cosas bien hechas y cosas que no.

En un municipio turístico como Torremolinos tiene retos en temporada baja, ¿cómo es el modelo turístico al que tiene que aspirar Torremolinos?

Hay un problema enorme: el todo incluido hace mucho daño a los pequeños comercios. Es cierto que puede haber hoteles que ofrezcan este servicio, pero al ser una práctica extendida hace que los turistas no gasten fuera. Aunque el principal reto que nos tenemos que plantear es el de romper con la estacionalización en el turismo y aspirar a traer al municipio a un turista de más alto nivel.