­Trágico hallazgo en la planta de residuos de la localidad de Casares. El miércoles por la tarde un operario que trabajaba en las instalaciones descubrió el cuerpo de un recién nacido, un hecho que ya está investigando la Guardia Civil para determinar el origen del bebé y las causas por las que se produjo su fallecimiento.

El suceso ocurrió pasadas las 18.30 horas del miércoles, cuando un trabajador del complejo medioambiental de Casares, dependiente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, encontró el cadáver del bebé, tras lo cual se dio aviso al servicio de emergencias 112 y la Guardia Civil. Según informaron ayer fuentes cercanas a la investigación del caso, el bebé fallecido es una niña y en el momento de su hallazgo no presentaba signos externos de violencia que hubieran podido provocar el fallecimiento, aunque habrá que esperar a los resultados de la autopsia, que se le iba a realizar ayer, para determinar las causas de su muerte.

El complejo medioambiental de Casares trata residuos procedentes de once municipios de la franja litoral de la Costa del Sol y el hallazgo del cuerpo se produjo en una de las cintas transportadoras.

Un caso similar ocurrió en la provincia en octubre del año 2012 cuando un operario halló el cuerpo de un recién nacido muerto, aún con el cordón umbilical colgando, en la planta de compostaje del vertedero de Los Ruices de Málaga capital. La autopsia realizada posteriormente reveló que el bebé nació vivo y que falleció por un traumatismo craneoencefálico.