­El grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Torremolinos presentó ayer una serie de reclamaciones a la nueva ordenanza que regula la tasa de recogida de basuras en el municipio, que llegó a tildarla de «probablemente anticonstitucional» y al menos «discriminatoria».

Según el portavoz local de la coalición, David Tejeiro, la modificación perjudica a cientos de ciudadanos de a pie y además «parece estar hecha a medida para beneficiar a dos grandes centros comerciales en concreto». La discriminación a la que se refiere Tejeiro «se da a la hora de determinar una serie de rebajas o subvenciones a la tarifa». Indica que sólo podrán disfrutarla «vecinos empadronados» y que sean «titulares de un pensiones abonadas por una institución pública española y, en todo caso, pensionistas mayores de 65 años».

«En Torremolinos viven cientos o miles de extranjeros que cobran su pensión de instituciones públicas no españolas, así como emigrantes españoles retornados que pueden cobrar su pensión del país donde han trabajado donde su vida activa», añadió el responsable municipal de esta formación.