El Ayuntamiento de Casares quiere poner en marcha un plan de acogimiento temporal dirigido a madres y niños de zonas de conflicto, tras el fracaso del plan de acogida diseñado por las autoridades europeas.

Representantes del Consistorio casareño se han reunido con miembros de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado y Málaga Acoge para perfilar este programa.

La iniciativa supondría la estancia temporal de 20 personas, 10 niños con sus madres, durante un período de dos semanas en Casares.

Se trataría de familias refugiadas en nuestro país procedentes de zonas en conflicto bélico y que se encuentren en pisos de acogida.

El objetivo de este proyecto es incidir en la integración de estas personas, explica la concejala Rocío Ruiz.

Para ello, se ofrecería un programa de actividades educativas, de ocio y tiempo libre a los niños, y un curso de formación en alguna profesión a sus madres.

El proyecto se está diseñando a un año vista por lo que se desarrollaría el próximo año durante el mes de julio, cuando el municipio cuenta con el recurso de la Escuela de Verano.