Para muchos jóvenes, a los que no les falta razón, las escuelas y conservatorios de música son lugares donde se aprende mucho, sí, pero de la manera más aburrida imaginable. Ellos declaran un intenso amor hacia la música, pero no lo suficiente como para soportar durante años el estudio de obras de Mozart, Beethoven, Wagner o Brahms que poco o nada tienen que ver con sus sonidos predilectos. Ahora, gracias a la iniciativa del Centro de Enseñanza de Música Moderna en Málaga, Cemma, aquellos que no entienden la vida sin los Beatles, Jimi Hendrix, Queen, Nirvana o Lenny Kravitz tienen ahora la oportunidad de cursar estudios superiores de rock.

Con el programa RockSchool, Cemma se convierte en la primera escuela en Andalucía –la segunda en España tras Barcelona– en ofertar cursos formativos de música moderna con titulación oficial europea. Las especialidades abarcan todas las preferencias posibles para convertirse en una estrella del rock: guitarra eléctrica, bajo, batería, teclado, piano, canto, vientos... «Siempre se ha considerado que la música rock es cosa de cuatro melenudos, pero no es así: es cultura musical y su estudio está, gracias a estos títulos, reglado, como ocurre con la música clásica o el jazz», destaca la directora de Cemma, María Luisa Pascual, que, además, puntualiza que los «chavales quieren aprender a tocar aquello que oyen». «Viven la música que escuchan y tienen en sus reproductores».

Los títulos oficiales de rock que Cemma ofrecerá a partir de enero de 2011 están reconocidos en toda Europa gracias al tratado de Bolonia, y al acuerdo de vinculación que el centro malagueño mantiene con la escuela Jam Session de Barcelona –la primera en España en esta materia–. Ambos centros colaboran con la RockSchool England y la Trinity College of Music and Trinity Guildhall, que son los encargados de expedir los títulos.

Los estudios comprenden las titulaciones en todos los niveles, Grado, Master y Doctorado, a través de un programa que ocupa desde la ejecución instrumental y vocal hasta la composición. «Según el nivel de cada alumno, la licenciatura en rock puede durar entre 8 ó 12 años, como en los estudios de música clásica», señala Pascual.

Lectura musical, educación auditiva, armonía, instrumento e incluso pruebas con una banda son algunas de las asignaturas por las que los aspirantes a roqueros tendrán que pasar para conseguir llegar a fin de curso. Las materias sobre géneros musicales, como no puede ser de otra manera, van desde el rock clásico hasta el punk, sin olvidar pilares fundamentales como el blues, metal, heavy, pop y funk. Y los referentes a tener en cuentan no podrían se otros que los Beatles, los Rolling, Led Zeppelin, AC/ DC, Hendrix o Zappa.

Málaga se convierte de esta forma en una ciudad pionera en Andalucía en dignificar la trascendencia del rock. Y gracias a estas titulaciones, la industria musical de nuestro país se nutrirá dentro de poco de profesionales malagueños que un día decidieron convertir la herencia de Elvis y Chuck Berry en su forma de vida.