Cena de Nochebuena en cuatro hogares malagueños... Así comienza la nueva película del siempre atrevido y sorprendente Ignacio Nacho. Este director de la tierra vuelve a la gran pantalla con una comedia trágica que refleja su madurez como cineasta, alejándose de lo artificial y basándose en la sencillez y en los diálogos. Nada de efectos especiales, ni figurantes, y escasos recursos económicos, unos personajes y una trama que seguro sorprenderán al público. El preestreno, hoy en el Alameda.

Hoy los malagueños podrán ver su ultimo filme 'Cruda'. Cuéntenos como surge este proyecto.

Siempre he tenido una profunda añoranza por volver a trabajar en Málaga. La verdad es que el problema siempre ha sido económico, no encontraba a nadie que me financiara una peli en mi ciudad. Al final, gracias a la vinculación tan especial que hemos tenido en el equipo, nadie ha cobrado por su trabajo.

¿Y cómo sale adelante una película en la que nadie cobra?

Los actores conocen mi forma de trabajar, saben que yo no cuento con ningún respaldo por parte de la administración, ni de ningún ente privado. Yo, desde mis humildes ahorrillos, hago una inversión a fondo perdido y consigo sacar el proyecto. Porque es un desembolso que, a priori, no tiene visos de recuperar ni un solo euro gastado.

Un proyecto absolutamente independiente en el que usted es el director, guionista y productor. ¿Ha sido difícil representar cada uno de estos papeles?

Para mí sería más difícil dirigir una película si yo no fuera el guionista. Lo más gravoso es ser el productor: me obliga a tener la cabeza en cosas que se alejan del discurso cinematográfico.

Cuatro historias que transcurren en Nochebuena. ¿Ignacio Nacho, fan de la Navidad?

A mí la Navidad me parece muy interesante, no solamente por la estética, sino también porque es un periodo sumamente divertido, donde todo se transforma. Es una mezcla de la alegría, la nostalgia y la ternura con lo horripilante. Quería crear situaciones muy minimalistas en cuanto al ámbito donde transcurrieran, en un salón, un comedor o en las estancias de una casa, y el asunto de la Nochebuena era un buen catalizador y unificador de todos los ingredientes que yo quería sacar a relucir en Cruda.

¿ Que diferencia a Cruda de sus películas anteriores?

Es una película más madura, en la que me olvido de los artificios. Ahora el trabajo es más humilde, he intentado ser más sencillo en la ejecución y más complejo en el discurso. Digamos que es una comedia trágica mucho más elaborada y elegante.

¿Y cómo una comedia puede ser trágica?

Hay muchos momentos en los parlamentos de los personajes donde lo que dicen en un primer impacto te puede provocar la risa, pero realmente tiene un trasfondo amargo. En muchas ocasiones los protagonistas se ríen de realidades que son bastante penosas y tristes.

Supongo que se imagina que muchos de los que han visto alguna de sus películas dirán de usted que es un friki...

Creo que no tengo la suficiente relevancia social para etiquetarme en ningún grupo. Si nos atenemos al significado etimológico de la palabra freak como extraño, entonces que me califiquen como un ser extraño del cine me parece estupendo, porque significa que no hago el cine que hace todo el mundo.

Como director de cine de autor, al margen de lo comercial, ¿cómo ve la industria nacional?

No podría hacerle una evaluación, la verdad. Lo que sé del cine español es porque me lo cuentan; no veo nada, nunca veo ninguna película española.

Pero alguna película española verá...

Sólo veo cine súper comercial americano; así veo algo diferente a lo que yo hago.