El Museo Carmen Thyssen de Málaga ofrece en su primera exposición temporal, que se abre al público mañana, una visión casi "secreta" de la colección de la baronesa, con numerosas obras mostradas por primera vez, además de analizar el diálogo entre el arte español y las vanguardias del siglo XX.

Artistas internacionales como Matisse, Braque o Monet "sirven para contar mejor la historia del arte español, que tantas veces depende del exterior o tiene paralelismos, coincidencias o casos como de telepatía", ha afirmado hoy en rueda de prensa Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen de Madrid y comisario de la exposición.

Se trataba de "entretejer las corrientes internacionales del siglo XX junto a las del arte español", y para ello, según Solana, se han "saqueado" diversos depósitos de la colección de Carmen Thyssen y se ha contado con otras firmas como las de Picasso, Gris, Miró o Tàpies.

Más de un tercio de las sesenta piezas que se exponen proceden del Museo Thyssen de Madrid, entre ellas "las obras maestras más deslumbrantes de la exposición", como "La casa entre las rosas", de Monet.

"Es una pequeña prueba de lo que estamos dispuestos a dar al Museo de Málaga, porque es un sacrificio para nosotros descolgar y despojar a alguna sala de su pieza principal", ha destacado Solana, que en tono jocoso ha asegurado que no ha querido ver esas salas de Madrid para "no tener un disgusto", aunque se "resignará" durante los meses de la exposición, hasta el próximo 16 de octubre.

Otra parte importante de las obras proceden del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), como testimonio de que, "entre 1880 y 1920, la mejor pintura española se hizo en Cataluña", con nombres como Casas, Rusiñol, Nonell, Anglada i Camarasa, Mir o Suñer.

"Las piezas sintetizan el espíritu de cada momento del modernismo, desde el más naturalista y realista de Casas y Rusiñol, continuando con la dimensión trágica y social de Nonell, lo decorativo y el 'art nouveau' de Anglada, lo trágico y lo decorativo de Mir y el noucentisme de Suñer", ha señalado Solana.

El tercer apartado de la exposición es esa "parte secreta" de la colección de Carmen Thyssen, "unos cuadros que no se han expuesto nunca y que la gente ni siquiera se imaginaba que la baronesa pudiera tener".

Aquí se encuadran unas obras de Saura "agresivas, ásperas y violentas, del mejor momento de su producción", o también de Perejaume, Mompó o Vasarely.

Estas piezas "muestran que la colección no se queda en el siglo pasado ni en una modernidad más o menos clásica, y dan cuenta de una evolución radicalmente moderna" y de que Carmen Thyssen "es capaz de coleccionar una pintura muy clásica del siglo XVIII o XIX, y también de internarse y avanzar hasta lo más contemporáneo", ha resaltado Solana.

Por su parte, la baronesa, que ha participado personalmente en la instalación de los cuadros -"el último ser terminó de clavar ayer", ha revelado-, ha mostrado su satisfacción por esta primera exposición temporal del Museo de Málaga, inaugurado el pasado 24 de marzo.