El Festival de Humor y Magia Jajejijojú celebra en este año su décima edición con el mismo objetivo que el primer día, «llenar un teatro de niños y que se rían», explica su creador, el dibujante Ángel Idígoras. Además, asegura que el fin primordial es contribuir a que la vida de los pequeños hospitalizados «se vea poco alterada y que el hecho de estar hospitalizados no dificulte la expresión de vertientes como son la artística, intelectual, social, etcétera».

El festival acoge este año una gala especial para celebrar su décimo cumpleaños. Así, sobre el escenario actuarán los magos Xavier Tapias, Kayto, Benji, Jorge Blass, Norbert Ferré y el acróbata Othman; todo ello presentado por Síndrome Clown. Con este cartel «hacemos una antología de los artistas que más han gustado en estos diez años», precisó Idígoras.

La gala tiene lugar esta mañana, a las 12.00 horas, en el Teatro Cervantes, pero ayer por la tarde los niños que no pueden acudir al teatro a disfrutar de las actuaciones, sí que pudieron reir, divertirse y deleitarse con una función especial en el salón de actos del Hospital Materno Infantil de Málaga.

Así, en sus comienzos, el festival se realizaba junto a la Fundación Theodora, y en los últimos años, la recaudación íntegra de la taquilla se ha destinado la Asociación de Voluntarios de Oncología Infantil (AVOI) que, formada por unos 150 voluntarios, se dedica a entretener de lunes a domingo y mañanas y tardes a todos los niños ingresados.

«Las risas de los niños que acuden al festival sirven para que se rían los niños ingresados en el hospital», afirma el presidente de AVOI, Juan J. Carmona, quien explica que con la recaudación de la gala se pueden comprar materiales para las actividades que se realizan en el hospital. Asimismo, «también damos un descanso a los padres», subrayó.

Pero, no sólo eso, sino que tal y como explican Carmona e Idígoras, con Jajejijojú «también se logra el objetivo de sensibilizar», y la respuesta del público, todos y cada uno de los años, «ha sido de lleno absoluto» por lo que aunque son muy positivos respecto a la continuidad del festival, Idígoras señala que «todos los años la recaudación de la taquilla va íntegramente destinada a AVOI, pero desde que el Ayuntamiento de Málaga nos quitó la ayuda que recibíamos, cada edición es más complicada de sacar adelante».