Cante, baile, imágenes de época y material audiovisual componen el homenaje que Miki Molina, hijo del cantante Antonio Molina, le brinda a su padre, una obra que recorrerá varias ciudades españolas y que se ha presentado hoy en el Teatro Cervantes de Málaga, donde tendrá su estreno nacional el jueves.
El espectáculo, protagonizado por el malagueño Rafa Garel, pasará por Madrid, Benidorm (Comunidad Valenciana), Barcelona, Albacete (Castilla-La Mancha), Bilbao, Ibiza (Islas Baleares), San Fernando (Cádiz), y destinos en Murcia, Andalucía, Castilla y León y América Latina están pendientes de confirmar.
El programa de la obra hace un recorrido por las coplas más famosas de Molina, desde "Soy minero" hasta "Adiós España", pasando por "El agua del avellano" o "Cocinero cocinero", que contarán con el apoyo de pequeñas dramaturgias mezcladas con danza e imágenes realizadas para la ocasión.
"Es un espectáculo multidisciplinar, muy sencillo, como mi padre, pero a la vez muy potente por la música que presenta", ha comentado Miki Molina en la presentación, y ha destacado del protagonista del homenaje, Rafa Garcés, que "lleva algo" de su padre "muy dentro".
El homenaje cuenta con la "total aprobación" de la familia del cantante, según ha informado el Teatro Cervantes mediante un comunicado, que ha destacado que el trabajo de su hijo ha sido "determinante" para que la idea original y los arreglos musicales, las coreografías y proyecciones sean "los más reales".
Antonio Molina de Hoces nació en Málaga en 1928 y se trasladó a Madrid con catorce años, donde ganó un concurso que le permitió grabar su primer disco y llegar al éxito a principios de los años cincuenta.
