El universo más íntimo del genio malagueño, posados en su estudio, la construcción de su imagen pública a partir de su consagración como una gran estrella mundial y la utilización que hizo la fotografía para alimentar el culto a su personalidad generó una ingente cantidad de instantáneas que se han reunido en una exposición que inauguró ayer el Museo Picasso Málaga, Conmigo, yo mismo, yo. Retratos fotográficos de Pablo Picasso, comisariada por la historiadora Kerstin Stremmel. Hasta el próximo 10 de junio podrá contemplarse la mayor recopilación hasta ahora de imágenes del maestro malagueño. Después, se instalará en Hamburgo entre el 2 de agosto y el 28 de octubre.

Su mirada, sus gestos, poses, su cuidada puesta en escena desde los inicios de su carrera hasta el final de su vida. Picasso conocía el poder de comunicación de la fotografía y desde un principio se interesó por este medio. De su entorno más íntimo, Picasso aparece con su perro afgano Kazbek en su casa parisina de Rue des Grands Augustins; almorzando con Françoise Gilot; haciendo de torero en un baile de disfraces, bailando en su balcón de La Californie o la popular fotografía en la bañera el día de su primer encuentro con David Douglas Duncan. Todas se exhiben ya en el Palacio de Buenavista en esta muestra que ha sido organizada por el Museo Picasso Málaga en colaboración con el Museum Ludwig de Colonia.

En esta amplísima selección aparecen también instantáneas de su círculo más privado de amistades en la bohemia parisina. Se puede ver al malagueño con Modigliani, que curiosamente aparece sonriendo, Max Jacob, Marais, Pierre Reverdy, Jean Cocteau, Pierre Matisse, entre otros.

O su personalidad más pública, como la pose frente al Guernica en la inauguración del Pabellón Español en la Exposición Universal de París (1937); descansando del rodaje de Le mystère Picasso; simulando ser arrestado durante una corrida de toros celebrada en su honor en Vallauris (Francia), o las icónicas de Robert Capa con Françoise Gilot y Picasso en la playa, sosteniendo éste una sombrilla, y de André Villers, donde el pintor fue inmortalizado con el revólver que le regaló Gary Cooper.

Y así hasta un total de 166 imágenes captadas por 34 prestigiosos fotógrafos, entre los que se hallan los máximos exponentes de la fotografía internacional, como Man Ray, Brassaï, Robert Doisneau, Irving Penn, Edward Quinn, Robert Capa, Michel Sima, Dora Maar, Henri Cartier-Bresson, Michel Sima, Ricard Avedon y André Villers. Todos ellos «dieron cuenta de la fascinación que sintieron por Picasso. Esta muestra es una fotobiografía, no tanto de la vida del personaje sino de la creación icónica del artista moderno», afirmó ayer en rueda de prensa el consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Paulino Plata acerca de esta exposición, que coloca al MPM «en la primera división internacional del mundo del arte».

Icónicas. «Estas imágenes reflejan cómo Picasso utilizó de forma brillante los medios y por otro lado la intención de los fotógrafos de hacer buenas fotografías del genio. Aparecen instantáneas icónicas y otras menos conocidas de Picasso», consideró la comisaria sobre esta muestra que se nutre a partir de la extensa colección fotográfica del Museo Ludwig y se completa con la participación de una treintena de instituciones, museos internacionales y colecciones privadas.

También esta colección «da cuenta del tránsito de la prensa ilustrada a los medios de comunicación y del encuentro entre la fotografía y la prensa», destacó el director artístico del MPM, José Lebrero, que añadió que en los años 50, los reporteros gráficos buscaban a los famosos y «Picasso entonces era una estrella mundial».

En la exposición se exhibe también un fragmento de la película Incontrare Picasso, filmada en 1953 y obra del director Luciano Emmer, que brinda la oportunidad única de contemplar a Picasso pintando los muros de la capilla de Vallauris, así como un cartel y dos documentos que la complementan. Del mismo modo, en la sala de proyección de la pinacoteca malagueña se exponen los retratos de los fotógrafos representados.